Archivada la denuncia por supuesto maltrato en una residencia de ancianos de Domus VI en Llíria
El juez no ve acreditado el delito contra la integridad moral al no haber dolo. El caso se abrió tras la difusión de un vídeo con imágenes de usuarios atados a sillas o presuntamente mal atendidos
El titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 de Llíria ha dictado un auto de sobreseimiento provisional de la investigación por supuestos casos de malos tratos a los internos de la residencia Domus VI de Llíria (Valencia).
Según ha informado la empresa gestora de este centro y ha confirmado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana a EFE, se ha ordenado el sobreseimiento de las diligencias que se abrieron el pasado mes de octubre, tras la recepción de una denuncia presentada por Fiscalía.
En este procedimiento figuraban como investigadas una persona física, la directora de la residencia, y dos empresas como personas jurídicas. Varios medios de comunicación difundieron el pasado mes de septiembre unas imágenes en las que se podían ver a ancianos residentes de este centro atados a sillas, con llagas o desnudos, supuestamente desatendidos para comer e incluso aparentemente abandonados tras caer al suelo. La difusión del vídeo, grabado por una extrabajadora del centro, causó consternación y originó el proceso.
Tras conocer el contenido de las grabaciones, la Fiscalía Provincial de Valencia abrió diligencias de investigación el 9 de septiembre. En un escrito remitido al juzgado, el fiscal indicaba que tras una investigación preliminar, las situaciones de abandono y desprotección a ancianos que parecen haber ocurrido en esa residencia “pueden ser constitutivos de varios delitos contra la integridad moral del artículo 173.1 del Código Penal”.
Sin embargo, el juez instructor ha confirmado ahora que “tras los interrogatorios practicados, no ve acreditado el delito contra la integridad moral al no haber dolo”, según han informado fuentes de la empresa en un comunicado. Cuando se difundieron las imágenes, los responsables de Domus VI aseguraron que estaban “fuera de contexto”. “Graban una situación puntual sin registrar el antes y el después” y “lamentamos el dolor que esta imagen están causando a los familiares”, manifestó el director de Operaciones de la compañía, José Luis Roselló.
Antes de difundirse el vídeo, la consejería de Igualdad e Inclusión Social que dirige Mònica Oltra comunicó al centro de Llíria una sanción de 174.000 euros después de inspeccionar las instalaciones, con capacidad para 150 residentes y con 35 plazas concertadas con la Generalitat. Este departamento detectó falta de personal médico y de enfermería, que fue subsanado; también material defectuoso en las habitaciones, falta de cuidados a algunas personas residentes e incumplimiento de contrato, pues no tenían servicio de peluquería y podología. Domus Vi compró el centro en noviembre de 2018 a la empresa Serviger y, desde entonces, la Consejería de Igualdad ha inspeccionado las instalaciones en cuatro ocasiones desde 2019, a instancias del Ayuntamiento de Llíria, que le trasladó las quejas de los familiares.
La multinacional Domus VI, con centros repartidos por buena parte de España, es la gestora de la residencia de Alcoi, donde murieron 73 internos durante la primera ola.
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