Sanidad afirma que España ha superado el pico de la tercera ola y alerta de la “situación crítica” de los hospitales

España alcanzó el pico de contagios de la tercera ola del coronavirus el fin de semana del 17 de enero y desde entonces ha empezado a descender ligeramente el número de casos. Esta es con seguridad la única buena noticia —aunque los retrasos en las notificaciones aún no recojan el cambio de tendencia— que puede extraerse de la comparecencia esta tarde del director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES) del Ministerio de Sanidad, Fernando Simón, que ha alertado de que el país necesita “de forma urgente” aliviar la presión asistencial que sufren los hospitales y que les ha llevado a “una situación crítica”.

“Nuestras UCI no pueden soportar mucho más de lo que están soportando. Tendríamos que hacer un esfuerzo por incrementar las medidas de control. Han pasado 20 días desde Navidad y hemos observado un incremento muy agudo después del fin de año. La transmisión no se corta inmediatamente. Podemos entender que después de ese pico el descenso va a ser mucho más lento”, ha seguido Simón.

Nueve comunidades autónomas, entre ellas todas las más pobladas, superan el 30% de ocupación en las unidades de cuidados intensivos (UCI) con enfermos de covid. Siete superan el 40%, con Cataluña y Madrid que ya rozan un 50%, y todavía peor Castilla-La Mancha (53%), la Comunidad Valenciana (61%) y La Rioja (64%).

En la práctica, esto significa que los enfermos más graves llevan días siendo atendidos en quirófanos y otros espacios reconvertidos en zonas de rescate de un sistema sanitario saturado que ha tenido que dejar a un lado casi todo lo demás para hacer frente a la pandemia. “Sufrimos la ocupación más alta desde la primera ola”, ha advertido Simón, quien pese a destacar “las mejoras” en la asistencia aprendidas desde entonces ha recordado que “las estancias medias en las UCI son de 20 o 21 días”, lo que hace más necesarias que nunca las medidas que frenen los nuevos ingresos y permitan aliviar estas unidades.

El retraso en las notificaciones (que hace que se informe de casos diagnosticados en realidad hace una semana o más) es la causa del nuevo récord marcado por los datos de Sanidad de hoy: 93.822 nuevos contagios respecto al pasado viernes (los lunes se suman los datos de tres días desde el sábado). Los fallecimientos son 767 desde ese día, un nuevo máximo en esta ola.

La incidencia ya alcanza los 885 casos por 100.000 habitantes y son seis autonomías (Comunidad Valenciana, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Extremadura, Murcia y La Rioja) las que superan el millar, mientras dos de las tres más pobladas (Andalucía y Madrid) están por encima de los 900. En todas ellas este indicador sigue al alza, ya que, como ha recordado Simón, este indicador “suaviza” la curva al tener en cuenta los datos de 14 días, y los ligeros descensos registrados en los últimos días aún pesan poco frente a los importantes aumentos registrados en los anteriores.

Como ha recalcado Simón, doblegar la curva es solo la primera de las duras pruebas que deben superarse para dejar atrás una tercera ola. Ahora falta que los hospitales aguanten el envite de nuevos ingresos, que previsiblemente durará dos o tres semanas más, antes de verse algo aliviados. Sanidad también da por seguro que los fallecidos, que superan de largo los 200 diarios (retrasos de notificación aparte), sigan subiendo, dado que “este es el último indicador” en cambiar de tendencia.

Simón ha explicado que la nueva variante británica ya “puede suponer el 5%” de los casos diagnosticados, “incluso más en algunas zonas”. Es mucho más de lo que hasta ahora había informado Sanidad, que ha reiterado que su contribución al actual auge de casos es mínima.

Sobre la posibilidad de que sea necesario aplicar un confinamiento domiciliario, Simón ha recordado que “muchas comunidades autónomas lo aplican de facto” y que en varias “hay pocas opciones más allá de salir a hacer la compra”. La última que ha decretado el cierre de bares y restaurantes ha sido Galicia este lunes.

Como contraste, el director de emergencias ha lamentado “las fiestas” que se han visto en los últimos días y el incumplimiento de las restricciones. “Tenemos que poner medidas colectivas que se puedan controlar. Estamos viendo muchos ejemplos en los que, si no hay un control externo, parece ser que la gente no cumple. Lo cual yo creo que es una pena”, ha afirmado antes de recordar que “falta muy poco” para que haya sido vacunada toda la población más vulnerable de España.

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