Urkullu apela al esfuerzo colectivo para afrontar la “reconstrucción emocional y cívica” de Euskadi

La epidemia de la covid-19 ha causado 1.813 fallecidos en Euskadi. Las instituciones vascas se han sumado este lunes al primer acto oficial organizado en esta comunidad autónoma en recuerdo a todas las víctimas del coronavirus. El lehendakari, Iñigo Urkullu. ha presidido el homenaje celebrado en el parque Sempervirens (Siempre verde) de Vitoria, inaugurado hoy coincidiendo con el inicio del otoño y erigido como un espacio público que representa “la voluntad de mantener vivo el recuerdo del sufrimiento padecido por tantas familias” y “el compromiso y la solidaridad expresada por la sociedad vasca en medio de la pandemia”.

“Les transmito nuestra condolencia. Nos dolemos con ustedes, cerca de ustedes. Queremos acompañarles en su sentimiento de pérdida. No están solas y solos”, ha proclamado Urkullu durante un acto al que han asistido familiares de los fallecidos, además de representantes del Gobierno vasco, el Parlamento autonómico, de las Diputaciones forales y de las tres capitales vascas, entre otros cargos públicos.

El homenaje se ha celebrado en el momento en que se conocía que el País Vasco suma 387 nuevos positivos detectados en las 7.316 pruebas PCR realizadas durante este pasado domingo. El porcentaje de infectados se sitúa en el 5,2%, ligeramente por encima de la registrada un día antes (el sábado fue el 4,7%), aunque se mantiene estable durante este mes de septiembre, en torno al 5%, el límite máximo para considerarlo como una transmisión comunitaria.

El mandatario vasco ha augurado “una dura y urgente recuperación económica y del empleo” durante los próximos años, por lo que ha apelado al “esfuerzo colectivo, el compromiso y la solidaridad” de la ciudadanía vasca para abordar “una reconstrucción emocional y de la convivencia social” en Euskadi. Urkullu ha llamado a afrontar esta reconstrucción cívica “con la mano tenida, impulsando el diálogo social en todos los ámbitos”.

Una sequoia gigante que fue plantada en 1860 y que se secó en 2014 se erige como referente del parque Sempervirens de la capital alavesa: “Sugiere introspección y reflexión entre la vida y la muerte. Su fuerza y solidez, a pesar de ser un árbol seco, representan la permanencia en la memoria colectiva del recuerdo de las víctimas de la covid-19”, ha dicho el lehendakari. Junto a este monumental árbol se ha plantado hoy otra sequoia de la variedad sempervirens, que, según Urkullu, representa “la vida y todo aquello que nos ha unido en medio del azote de la pandemia”. A partir de 2021, en este espacio, las instituciones conmemorarán el 21 de septiembre el día de las víctimas del coronavirus.

Urkullu también ha dedicado un recuerdo a las víctimas de otros lugares del mundo y ha destacado especialmente el esfuerzo de los trabajadores del sector sanitario y sociosanitario, así como a la labor desarrollada por los servicios esenciales de seguridad, protección civil, bomberos, limpieza, alimentación o suministros, entre otros. También ha alabado “el compromiso y la respuesta cívica” de la sociedad vasca ante esta crisis sanitaria.

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