Cuatro de cada 10 jóvenes están a favor de la pena de muerte para delitos muy graves
El 66,4% de los encuestados comparte que exista "libertad total" para abortar
Más conservadores en lo público; menos, en lo privado. Los jóvenes españoles de entre 15 y 24 años se mueven entre estos dos terrenos, según los resultados de un estudio que el Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud ha presentado este martes. El informe —elaborado con un millar de encuestas— revela, por ejemplo, que el 38,7% justifica que se aplique la pena de muerte por delitos "muy graves" y otro 17,8 % está de acuerdo, aunque con matices. El 66,4% admite que exista "libertad total" para abortar y el 66,1 %, que las parejas del mismo sexo puedan adoptar.
La pena de muerte ha ganado aceptación en comparación con un estudio similar de 2006; entonces obtenía una puntuación de 4,18 sobre 10 y ahora, de 5,05. En esta escala, 1 significa rechazo total y 10, aceptación sin reparos. "Con conservadores no queremos decir que sean de derechas. No necesariamente", aclara el sociólogo Javier Elzo, uno de los directores del estudio, aunque el 70% comparte que haya "gobiernos fuertes que garanticen orden y autoridad". Los resultados muestran poca confianza en las instituciones, principalmente en los partidos políticos (72%), los sistemas financiero (67,9%) y parlamentario (56,8%), y las instituciones religiosas (58,2%).
La crisis económica también ha incidido en los cambios de prioridades. Así lo explica Eusebio Megías, uno de los autores del estudio y director técnico de la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción (FAD), a la que pertenece el Centro Reina Sofía. "Vemos que han bajado los intereses hedonistas y personalistas, y han aumentado el compromiso con los asuntos colectivos, el interés por los temas políticos y el rechazo a los recortes sociales", destaca el investigador. La estabilidad laboral es importante para el 94,9% de los encuestados. El 63,4% de los jóvenes asegura que quiere tener un trabajo "como sea", aunque el 56% rechaza irse al extranjero.
Los resultados también muestran que se mantiene la jerarquía de "valores finalistas", aquellos que guían la conducta personal. Más del 90% considera "muy importante" tener personas en quien confiar, buenas relaciones familiares, ganar dinero y tener éxito en el trabajo. El 59,9% está de acuerdo con la eutanasia y el 66,5% califica como poco admisible que una persona se suicide. El estudio se realizó a través de encuestas en domicilios de 82 puntos de la península, entre septiembre y octubre de 2013, con un error muestral del 3,1%.
Tipología de los jóvenes
Los autores del estudio han dividido a los jóvenes en colectivos, según sus valores y características. El mayoritario, que agrupa al 28,2% de los encuestados, se caracteriza por mostrarse despreocupado por lo ajeno e instalado en el presente. No son —ni pretenden ser— conflictivos, señala el informe; quieren un mundo sin sobresaltos y proteger lo que tienen.
Al segundo colectivo, que corresponde al 22,1%, le han llamado "conservadores por la integración". En él incluyen a los jóvenes anclados en valores tradicionales, que no son rupturistas ni quieren liderar cambios, aunque son los que manifiestan mayor desconfianza institucional. Se inclinan por un Gobierno fuerte, que garantice el orden y la seguridad.
El tercer grupo mayoritario, que reúne al 21%, se define como individualista. Los jóvenes buscan abrirse camino en una sociedad que no les gusta y tienen una actitud más crítica. Rechazan el autoritarismo, valoran la vida cultural, no apoyan la pena de muerte y no se ven como consumistas. "Es el grupo que más a la izquierda se sitúa", se señala en el estudio.
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