El juez ordena la detención judicial de 72 horas para los padres de Ashya King
La familia King defiende que el niño siempre estuvo bien cuidado Viajaron a Málaga con la intención de vender una casa para costear otro tratamiento
El caso del niño Ashya King, sacado por sus padres del hospital de Southampton (Reino Unido) donde estaba siendo tratado de un tumor cerebral, ha quedado en una suerte de compás de espera en la Audiencia Nacional. El magistrado Ismael Moreno ha decretado “detención judicial” por un plazo máximo de 72 horas para los progenitores del menor, arrestados el pasado domingo en un hostal de Benajarafe (Málaga) donde acababan de registrarse junto con sus seis hijos tras huir el jueves del Reino Unido. El juez ha adoptado esta decisión cautelar mientras recaba un informe sobre el estado de salud del niño, de cinco años, solicitado de manera urgente al Hospital Materno Infantil de Málaga, y se traduce al español la documentación médica sobre Ashya aportada por el abogado de la pareja.
Brett y Naghemeh King, que hoy han sido trasladados a la prisión de Soto del Real tras comparecer ante el juez, pretenden que su hijo sea sometido a una terapia de protones, un tratamiento alternativo a la quimioterapia y radioterapia tradicionales y que solo se aplica, de manera muy excepcional y para casos muy concretos, en un hospital del Reino Unido. Según ha declarado el letrado de la familia, Juan Isidro Fernández Díaz, el viaje a Málaga tenía por objeto vender una propiedad que los King tienen en esa provincia y con el dinero obtenido costearse el tratamiento alternativo de su hijo en la República Checa o en Estados Unidos.
El matrimonio King fue detenido en virtud de una Orden Europea de Detención y Entrega (OEDE)cursada por el Reino Unido a través de Interpol. Los padres de Ashya, en su comparecencia ante el juez Moreno han rechazado su entrega a las autoridades británicas. El abogado de la familia ha asegurado a las puertas de la Audiencia Nacional que confía en que mañana o pasado sus clientes queden en libertad después de que el magistrado haya examinado toda la documentación.
El letrado ha insistido en que el menor enfermo ha estado atendido por su familia en todo momento y que la decisión de sus padres de sacarlo del hospital para buscar una terapia menos agresiva “no tiene nada que ver” con el hecho de que el matrimonio profese la religión de los Testigos de Jehová. Brett y Naghemeh King están imputados por un delito de crueldad contra un menor de 16 años, tipo delictivo que no tiene equivalente exacto en la legislación española y que podría equiparse al maltrato en el ámbito familiar.
Han arrancado a un niño pequeño que se está muriendo del cuidado de sus padres. Es algo inconcebible Patricia King, la abuela
“Estos padres quieren a sus hijos. Son padres de otros seis hijos, los quieren profundamente y todo lo que se ha hecho es manipular la información y faltar a la verdad”, ha lamentado el abogado. En su comparecencia ante el juez, que en teoría no tenía más objeto que preguntarles si estaban dispuestos a ser puestos a disposición de la justicia del Reino Unido, los padres han relatado que el niño ha sido ya operado en Inglaterra de un tumor cerebral. Y han añadido que no había otras posibilidades más que el tratamiento de radioterapia y quimioterapia, que rechazan por los efectos secundarios que acarrea.
El letrado Fernández Díaz, que se ha entrevistado brevemente con sus clientes en los calabozos de la Audiencia Nacional, ha señalado que los King están desesperados por la situación, y que se plantean querellarse contra el hospital de Southampton que denunció el secuestro del menor por injurias y calumnias.
“El trato que mi hijo y mi nuera y Ashya han recibido va más allá de la crueldad. Han arrancado a un niño pequeño que se está muriendo de un tumor cerebral del cuidado de sus padres, que han estado junto a él cada minuto de cada día. Es algo inconcebible”, se ha quejado la abuela del menor, Patricia King, en declaraciones a la BBC. El niño se encuentra ahora en el centro sanitario malagueño al cuidado de su hermano mayor, Daniel, de 23 años. El menor se encuentra en la planta de Oncología Pediátrica y su estado general es bueno, según el abogado Fernández Díaz. "En ningún momento ha corrido riesgo la vida del niño", ha destacado el letrado, quien ha asegurado que su padre controla “perfectamente” la máquina que le proporciona alimento.
A medida que se ha ido conociendo la versión de la familia, Reino Unido ha modulado su opinión
Una vez que los padres han rechazado su entrega al Reino Unido, su caso deberá ser estudiado por la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, un trámite que puede durar varias semanas. Tras agotarse el periodo máximo de 72 horas de detención judicial decretado por el juez Moreno con el dictamen favorable de la fiscalía, el magistrado puede ordenar su libertad sin condiciones o con medidas cautelares como la presentación cada cierto tiempo ante un juzgado o comisaría.
A medida que se ha ido conociendo la versión de la familia, tanto a través del abogado como a través de los vídeos colgados en Youtube por los hijos mayores de la pareja, la prensa del Reino Unido ha ido modulando su opinión acerca de los King. Después de haber sido tratados en los primeros días en algunos medios, especialmente en los tabloides, como “secuestradores”, su caso genera ahora una ola de compasión, informa AFP. También se ha puesto en entredicho la decisión de la policía británica de lanzar una búsqueda continental que ha desatado una notable alarma social.
El comisario adjunto Chris Shead reconoce la polémica, pero defiende la forma de actuar: “Prefiero que critiquen nuestra determinación de actuar que tener que explicar que un niño ha muerto. Los médicos nos decían que Ashya estaba en grave riesgo. En esas condiciones, no voy a pedir disculpas”.
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