“No se trata solo de hacer sudar la pista”

Ahora es el momento, sí o sí. Ese es el concepto que late con fuerza en los beats de los dj y productores valencianos Adrián Lurbe, de 25 años, y José Martí, de 24, compañeros de un viaje musical que lleva desde 2010 “haciendo ruido” en las pistas españolas y europeas. Número uno en la lista iTunes nada más lanzarla, Kostrok publicó en abril su primera canción, Right Now, con la voz de Dani Belenguer, convertida en un éxito internacional publicitando los playoffs de la NBA para las emisiones televisivas en Latinoamérica.

En el ambiente recogido de un local vintage en el barrio de Ruzafa, el hervidero cultural de Valencia donde vive José, coinciden en aceptar para el té la recomendación de la casa. Los componentes de Kostrok se conocieron en las fiestas de club en las que Adrián pinchaba electrónica pura. José, que estudiaba Ingeniería Técnica en Diseño Industrial y había tocado la batería en varios grupos, se ofreció para ayudarle con la estética de su espectáculo, y acabaron compartiendo cabina. Tras organizar intercambios con dj’s europeos, el verano de 2011, ya como productores, empezaron a salir de España bautizados con la denominación actual. Con referentes galos y yanquis, la evolución de su música va a la caza de temas que salgan de la pista para llevarlos a un público más global con toques de pop-rock. “Queremos apartarnos de la electrónica más machacona, no se trata solo de hacer sudar la pista”, matiza Adrián, hijo de familia del mundo del Derecho.

Kostrok no da pasos pequeños. En busca de representante y sello discográfico, estos jóvenes dj’s recorrieron “jornadas mochileras” hasta topar con Parlophone, filial durante décadas de EMI y ahora de Warner, la “multi” que respalda sus ganas de hacerse sonar. De ese apoyo llegaron las mezclas con Julien Delfaud, el remix de Yuksek y la remasteri-zación a cargo de Mike Marsh. Todo a lo grande. “En ningún momento pensamos ir a lo pequeño. Si un artista de fuera puede escucharse aquí, ¿por qué un artista de aquí no puede hacerlo fuera?”, reivindica José, hijo de físicos.

La combinación Valencia y música electrónica ha conducido, para ellos, a una asociación errónea. Entre los sorbos al té con ginseng, miel y limón, reconocen con cierto hastío que siempre les preguntan por el bakalao. Pero siendo dj’s y valencianos, la referencia se torna inevitable. “La ruta fue un movimiento cultural muy importante y hubiese tenido mucha repercusión de no ser por el tema de las muertes, las drogas… Durante 20 años se ha visto coartado en Valencia por un sentimiento de culpa, con miedos y complejos que ahora intentamos romper”, explica José.

Porque la selva Internet obliga a definir la oferta, Kostrok une música, diseño y estrategia. “Disco” apenas se pronuncia. Su público se perfila en el joven millennial, que se empapa de los mandamientos de Spotify, Vevo y Twitter. En Youtube, los chicos del rombo cuadrado, su imagen corporativa, acaban de colgar el segundo capítulo de Kostrok Life, el relato de su vida cotidiana. “Se trata de crear tu mundo dándote a conocer cómo eres con la ficción que quieras”, observa Adrián. Tras un verano en el estudio y a la expectativa de abrir sello propio, su peculiar cabina bordeada de leds y espectáculo interactivo comienzan a rodar por España este sábado en el DCode Festival 2013 de Madrid.