El Cuco ingresa en un centro de menores

Francisco Javier García Marín, alias El Cuco, ha ingresado voluntariamente esta mañana en un centro de menores ubicado en la provincia de Córdoba para cumplir la sentencia de la Audiencia Provincial de Sevilla que le condena a dos años y once meses de internamiento seguidos de un mes de libertad vigilada por un delito de encubrimiento en relación al caso de Marta del Castillo, la joven asesinada en Sevilla en 2009.

El abogado de El Cuco, Fernando de Pablo, ha informado de que el juez de Menores número 1 de Sevilla, Alejandro Vián, le ha dado un plazo de tres días para su ingreso voluntario en un centro de menores ya que el condenado lo era cuando murió la joven sevillana. Se ha estimado como "lo más oportuno" que este ingreso se realizara de forma inmediata, ha añadido el letrado.

La madre ha sido la encargada de trasladar a 'El Cuco' a un centro de menores ubicado en la provincia de Córdoba, donde deberá permanecer hasta marzo de 2013.El Juzgado de Menores aún tiene que dirigirse a las partes para consultar si consideran que el joven debe quedarse en el mencionado centro de menores o bien ingresar en prisión, ya que ahora es mayor de edad.

El Cuco declaró el pasado miercóles como testigo después de haber sido condenado como encubridor y absuelto de asesinato y violación en un proceso que le enjuició en paralelo como menor de edad, ya que tenía 15 años cuando murió Marta. Este acudióa la Audiencia de Sevilla con el pelo teñido, muy largo y un pañuelo azul al cuello. Durante el interrogatorio del fiscal y las partes, mantuvo una actitud desdeñosa y por momentos chulesca. El tribunal le pidió que replicara con educación. Su colaboración para desvelar la verdad fue mínima y sus aclaraciones sobre el día del crimen, oscuras. Al igual que los otros implicados, no dio pistas sobre el paradero del cadáver de la joven: "Si supiera dónde está el cuerpo de Marta lo habría dicho hace tiempo. Pregúnteselo a él [en referencia al principal acusado Miguel Carcaño]", espetó al letrado de la familia de la chica.Tras finalizar la quinta sesión del juicio, decenas de personas se abalanzaron sobre los vehículos policiales que protegían a El Cuco a su salida entre continuos golpes y gritos de "asesino".