Akelarre en Cervera

Un año más, y ya son treinta y uno, Cervera celebra el Aquelarre el último fin de semana de agosto, con una experiencia acumulada, una asistencia de público que no para de crecer año tras año y la ilusión, viva como el primer día, de ir haciendo camino hasta llegar a los 50 años de Aquelarre. Por todos estos motivos, cada año hacemos un gran esfuerzo para ofreceros una fiesta más grande y diferente.

Los días 29, 30 y 31 de agosto de 2008, Cervera volverá a llenar las calles centenarias de su casco antiguo de correfocs, espectáculos, música, magia y esoterismo, para que las decenas de miles de visitantes que cada año reúne el Aquelarre puedan disfrutar de tres días, con sus noches, llenos de misterio y de propuestas lúdicas para grandes y pequeños, vecinos y foráneos.

Los disfraces salen del armario y aparecen los máximos protagonistas del festejo: les bruixes, els diables y el mascle cabró. Este último, el macho cabrío, que es la representación terrenal de todos los demonios —Satán, Belcebú, Lucifer, Luzbel y Mefistófeles—, recorre las empedradas calles de la ciudad escupiendo fuego, soltando chispas y anunciando a vecinos y forasteros que comienzan tres días, con sus correspondientes noches, llenos de misterio y diversión.

Todo el casco antiguo se convierte en un escenario por el que corren los correfocs y deambulan magos, quiromantes, echadores de cartas, augures, hechiceros, sanadores y un sinfín de personajes con actitud o, por lo menos, con apariencia esotérica.