Condenan a la Junta de Andalucía a pagar más de un millón a una madre por quitarle la tutela

La Audiencia de Sevilla ha condenado a la Junta de Andalucía a indemnizar con 1.400.000 euros a Carmen Fernández por el "calvario" que considera que sufrió con la retirada de la custodia de sus hijos Iván y Sara, en un proceso que califica como "absurdo", y en el que considera que fueron "pisoteados" los derechos de los menores a estar con su madre, y por el que resultó seriamente afectada la salud de ésta. La sentencia no es recurrible, por lo que el gobierno autonómico tendrá que abonar esa cantidad en los próximos 20 días.

La sección Sexta de la Audiencia critica además la sentencia anterior y califica el proceso de "absurdo, sorprendente y carente de todo fundamento legal", en palabras textuales. Afirma además que el titular del juzgado número 7 de familia de Sevilla, Francisco Serrano, procedió "de manera subjetiva a ampliar los plazos procesales" y dictó sus resoluciones en forma de sentencia, y no de auto, "atribuyéndose facultades legislativas".

El duro camino que ha recorrido Carmen Fernández comenzó cuando la Junta de Andalucía asumió la tutela de sus dos hijos cuando éstos tenían cuatro y cinco años. La razón es que Carmen sufría en esos momentos de alcoholismo. El gobierno autonómico dio a los niños en acogimiento preadoptivo a una familia de Dos Hermanas (Sevilla), y una vez que la madre superó su enfermedad, la Junta no le permitió recuperarlos. Y todo ello pese a que desde 1996 ha ganado todos los pleitos que ha entablado.

Los derechos de los niños, "pisoteados"

La Audiencia afirma que durante los diez años que ha pasado sin sus hijos han sido "ignorados y pisoteados" los derechos humanos elementales de los hermanos a la "afectividad, convivencia, ligazón natural y proximidad con su madre".

Por ello, la Audiencia anula la decisión del juzgado de Familia, que solo concedió a Carmen Fernández los 72.000 euros equivalentes a la pérdida de sus hijos en un accidente de tráfico, y le concede un amplio abanico de indemnizaciones que tienen en cuenta el cáncer que padece y que los jueces consideran "consecuencia directa o indirecta del sufrimiento soportado" y por lo tanto "lesión sufrida de manera ilegítima".

Según la Audiencia, "se mire por donde se mire, ningún parangón es posible establecer entre un fallecimiento por accidente de tráfico con la ilegítima privación de unos hijos desde hace diez años, con muy graves circunstancias que se agravaron hasta extremos de difícil narración".

La niña volvió con su madre a los 14 años

Parte de la indemnización es por la frustración de la madre al ver que perdía su "razonable expectativa" de recuperar a sus hijos, realidad que "se alejaba más y más, recreando un dolor que iba in crescendo, cual si a un cuerpo se le van arrancando de forma lenta pero progresiva los distintos miembros".

En septiembre del 2004, la niña, que entonces tenía 13 años, dejó voluntariamente a sus padres de acogida y volvió con su madre biológica, pero según el fallo judicial no se puede considerar que Carmen la haya recuperado porque "la relación nunca podrá ser idéntica después de haber perdido toda la niñez e infancia". Además, "el estado de salud con que ha regresado hace presagiar todo un calvario en el desarrollo y tratamiento de la personalidad de la menor", dice la Audiencia.

Otras dos reclamaciones

Carmen Fernández no ha terminado, sin embargo, su guerra contra el sistema, ya que tiene pendientes aún dos causas judiciales. La primera de ellas es una reclamación de un millón de euros al ministerio de Justicia por los diez años que ha tardado en resolverse su caso, y otra contra la consejería de Igualdad y Bienestar Social de Andalucía, por la forma en que le retiró la custodia de sus hijos, cuya cuantía no puede precisar puesto que algunas de las partidas que se demandaban en ella están incluidas en la indemnización de 1,4 millones concedida ahora por la Sección Sexta de la Audiencia.

Su abogado afirma que la Junta "jamás debió entregar a esos niños en acogimiento preadoptivo" porque Carmen Fernández, a los tres meses de que le retiraran a sus hijos, ya tenía informes favorables sobre su proceso de recuperación del alcoholismo.y dijo confiar en que este caso sirva "para que no vuelvan a repetirse actuaciones parecidas y que las cosas cambien".