El año en que China descubrió América
Una carta de navegación fechada en el siglo XV dibuja el continente americano como supuestamente lo vio un personaje histórico chino, Zheng He
La efervescencia del capitalismo chino, la necesidad por descubrir nuevos mercados como el del ocio, el ansia por demostrar al mundo de lo que es capaz el poder del dragón y, en definitiva, la necesidad de recuperar una tradición cultural milenaria, llegando si es preciso a reinventarla: todos esos elementos se mezclan en torno al anuncio de que un navegante chino descubrió América antes que Colón. Un consejo: no tire todavía sus libros de historia a la basura.
El anuncio ha sorprendido al mundo por cuanto ataca uno de los dogmas de la historia moderna, y que admite como indiscutible que América fue descubierta en 1492 por un navegante, en cualquier caso europeo. Liu Gang, un abogado chino, afirma ser el orgulloso poseedor de un mapa confeccionado 74 años antes de que Colón desembarcase en el Caribe (o más exactamente, de una copia de éste realizada en el siglo XVIII), y en el que aparecen perfectamente dibujados los contornos de la costa occidental de América.
Lo que Gang, aficionado en sus ratos libres a lo de coleccionar mapas, quiere hacer creer al mundo es que el eunuco Zheng He, un personaje histórico, llegó en el siglo XV a lugares que los europeos tardarían décadas e incluso siglos en conocer. Coincide, de paso, con el ex comandante de submarinos de la Navy británica, Gavin Menzies, que ya plasmó esa idea en un libro.
Del Yangtsé a Terranova, en 13 años
El problema con el mapa es que es demasiado preciso. Tanto, que dibuja a la perfección América desde el Cabo de Hornos a Alaska, incluyendo el istmo de Panamá. Incluye así el Océano Glacial Ártico sobre América del Norte (la evidencia definitiva de que esa zona permanentemente helada era agua salada sólo se tuvo en el siglo XX), y señala perfectamente la Antártida, un continente difícil de alcanzar incluso hoy.
Eso supone que el navegante chino llegó a todos esos lugares, y además cruzó al Atlántico por algún punto. Una vez allí pudo, además, cartografiar con todo detalle el Golfo de México (aunque misteriosamente no reparó en ninguna de sus islas) e incluso llegó a intuir la gran Bahía de Hudson, en el norte del continente, con su acceso a los Grandes Lagos.
"¿Nos está diciendo que Zheng He, en 13 años (desde 1405, año en que empezaron sus viajes, a 1418) recorrió todas las costas de América y la Antártida, y tuvo tiempo para recogerlo en un mapa?", decía un periodista. La respuesta de Liu es categórica: "sí".
El mapa, el libro y la película
Los escépticos apuntan a dos coincidencias, a falta de una: estos días se presenta en China la traducción al mandarín de un libro publicado originalmente en el Reino Unido, en el que su autor, Gavin Menzies, asegura que los chinos llegaron a la costa oeste de lo que hoy es Estados Unidos allá por 1421.
El libro de Menzies es todo un bestseller que ha sido ignorado por la sesuda historiografía británica, y que contradice en parte lo que Liu dice que de su mapa se puede deducir. Menzies afirma en él que, en efecto, Zheng llegó a América, pero de su lectura no se deduce que viajase lo suficiente como para hacer un mapa así.
Al culebrón pseudohistórico se suma el hecho de que se esté preparando en estos momentos una película sobre los supuestos viajes de Zheng He, un personaje real cuya perseverancia y visión conmemoró China el pasado año 600 años después de que, como recoge la historia oficial, comenzase un viaje que, esta vez sí, le llevó a África.
Parece pues que hará falta mucho más que un mapa para dar la vuelta a una historia que tuvo mucho que ver, precisamente, con el nacimiento del capitalismo en Europa.
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