Un anciano mata a su mujer en Zaragoza a golpes con una llave inglesa

Un anciano de 70 años ha matado presuntamente a su mujer, de 73, a golpes con una llave inglesa esta mañana en el domicilio que ambos compartían en Zaragoza, según han informado fuentes de la Delegación del Gobierno. El presunto agresor, que presentaba dos profundos cortes en las muñecas dado que había intentado suicidarse, ha declarado a los agentes que ha acabado con su esposa para que "no sufriera" porque estaba enferma y porque tenían problemas económicos.

El presunto homicida, cuyas iniciales son J. T. F., se ha presentado sobre las diez y media de la mañana en las dependencias de la Brigada de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Policía de Zaragoza, donde ha explicado que ayer por la noche mató a su esposa, M. D. B., en el domicilio familiar de la capital aragonesa.

En su declaración, el presunto agresor, que presentaba dos profundos cortes en las muñecas dado que había intentado suicidarse, ha explicado, "bastante alterado" según los agentes, que había matado a su mujer por que se encuentra en una situación "desesperada". Así, J. T. F. ha afirmado que su mujer estaba enferma y que la ha asesinado para que "no sufriera" y por problemas económicos, "porque no les llegaba con la pensión".

Sin denuncias por malos tratos

El hombre presentaba dos profundos cortes en ambas muñecas, ya que, al parecer, había intentado quitarse la vida con un cuchillo de cocina. Según fuentes de la investigación, no tiene denuncias por malos tratos, carece de antecedentes y no hay órdenes de protección a la víctima.

Tras la declaración, varios agentes se han desplazado al domicilio de la pareja, en el número 27 de la calle Concepción Arenal, donde han encontrado el cadáver de la mujer, que presentaba fuertes golpes en la cabeza. El cadáver se encuentra en el Instituto de Medicina Legal de Zaragoza para practicarle la autopsia y determinar la hora y las circunstancias exactas de la muerte.

Fuentes de Delegación del Gobierno han añadido que el hombre ha sido trasladado al Hospital Provincial de Zaragoza para practicarle las curas necesarias en sus muñecas. Los cortes eran "bastante profundos" pero no afectaron a ninguna arteria ni vena importante. A estas horas, permanece en la Jefatura de Zaragoza a la espera de que la policía lo interrogue de nuevo cuando "se estabilice psicológicamente", mientras se intenta localizar en Andalucía a su familia. La pareja no tenía hijos y no se le conocen lazos familiares en Zaragoza.