China suspende las adopciones de forma indefinida a causa de la neumonía atípica

China ha suspendido temporalmente las adopciones internacionales para "evitar movimientos de personas" que podrían propagar el Síndrome Respiratorio Agudo y Grave (SARS, en sus siglas en inglés), del que se han contagiado más de 5.100 personas sólo en el gigante asiático, según ha informado hoy el Centro de Adopciones chino en su página web. En esencia, el proceso de adopciones no se ha visto afectado, pero la entrega de los pequeños ha quedado congelada hasta nuevo aviso, puesto que las autoridades chinas no permiten a los padres adoptivos que viajen a China a recoger al niño.

El Centro de Adopciones de Pekín, que centraliza la adopción de niños de toda China, señala que se permitirá a los padres que ya se encuentran en el país proseguir los trámites y que la medida tampoco se aplica a los extranjeros que residen en China, pero que se suspenden hasta previo aviso las nuevas adopciones. Los que ya han recibido una carta de autorización deberán hacer "lo posible para aplazar su viaje" pero se podrá llegar a acuerdos si no fuera posible. Además, la validez de la carta se prolonga de tres a seis meses.

Por último, los candidatos a la adopción que esperan la invitación para ir a recoger un niño a China deberán esperar a que "la situación sanitaria lo permita". Se trata de la primera vez que se paralizan las adopciones explícitamente por la epidemia de neumonía atípica que asola el país, donde ya han muerto 275 personas. Así, el centro ya cerró sus puertas a finales de marzo hasta el 6 de mayo, lo que supuso la paralización del envío de invitaciones a los padres, aunque en esa ocasión aludió a las vacaciones del Primero de Mayo, Día del Trabajador, para explicar el cierre de sus oficinas.

Sin cifras oficiales

Hasta hoy, no se ha informado de ningún caso de SARS en los orfelinatos chinos. Aunque el centro rechaza desvelar el número de niños adoptados cada año, China se ha convertido en uno de los principales países del mundo que ofrece a más niños, en su gran mayoría niñas, a menudo no deseadas en el campo debido a la política de hijo único y a la preferencia por los varones. Después de EE UU, que adopta más de 5.000 niños al año, España es el país que más adopta en China. En 2002 se tramitaron más de 1.300 adopciones desde España y, desde noviembre del año pasado hasta abril de 2003, más de 700 familias españolas han viajado a China por este motivo, la mayoría a Cantón, foco de la neumonía.

Mientras tanto, el pánico a contraer la enfermedad causa más estragos que el propio mal. Así, ocho millones de trabajadores temporales huyeron de las ciudades durante las últimas semanas y regresaron a sus aldeas natales, a pesar de los esfuerzos gubernamentales para evitarlo. "A pesar de que no hay constancia de infecciones a gran escala en el campo, el éxodo de millones de trabajadores preocupa mucho, pues son portadores potenciales de un virus que en las zonas rurales es mucho más mortal", ha reconocido un oficial del Ministerio de Salud.

El viceministro de Agricultura, Liu Jian, señaló ayer en rueda de prensa que a causa del virus "se ha disparado en los últimos meses el número de trabajadores que regresan de las ciudades al campo". Sin embargo, intentó restarle importancia y declaró que, de los ocho millones, "la mitad lo ha hecho por miedo al contagio, mientras que la otra mitad ha regresado para ayudar en las tareas de recolección de las cosechas".