Schwarzenegger, ¿el ‘aprendiz’ de acoso sexual de Donald Trump?
El ex gobernador será el próximo presentador del reality del magnate. La prensa recopila su historial de abusos para hacer símiles con la actitud misógina del próximo presidente de EEUU.
El próximo 2 de enero se estrenará en la NBC una nueva temporada de The Celebrity Apprendtice, el reality con el que Donald Trump acrecentó su popularidad mediática, se ganó un rivalidad histórica con Joan Rivers y acuñó el «estás despedido» como frase característica del programa. Aunque el futuro presidente de los EEUU ha confirmado que continuará como productor ejecutivo del programa, quién ha tomado su puesto como conductor es otra estrella mediática que se pasó (y ganó) en política: Arnold Schwarzenegger.
El culturista/Terminator/exgobernador de California (ejerció hasta 2011) actuará como CEO y tendrá como consejeros a Warren Buffett, Tyra Banks, Steve Ballmer o Jessica Alba, entre otros. Sin embargo, los focos de las cámaras y la política no son las únicas cosas que tienen en común el austríaco y el magnate. Al hilo del anuncio de la nueva temporada, la prensa estadounidense ha tirado de hemeroteca para recopilar otro símil entre ambos: las denuncias de acoso sexual y conducta inapropiada de ambos con las mujeres.
Si de Trump es bien conocida su mirada misógina del mundo y su privilegio de «agarrar por el coño» a las mujeres debido a su fama, Schwarzenegger ha pasado por un camino similar. Amy Zimmerman, desde The Daily Beast, ha recopilado algunas, pero basta con bucear en la hemeroteca de los diarios internacionales para encontrarse con multitud de denuncias durante la última década y que ya entorpecieron (poco) su campaña a Gobernador en 2003.
En esa época, Los Angeles Times publicó un reportaje en el que seis mujeres denunciaron conductas de acoso sexual en sets de grabación y en oficinas de la industria desde los años 70 hasta la década del 2000. Tres de ellas declararon que el actor les agarró de los pechos sin permiso, una cuarta dijo que el austríaco metió su mano por debajo de su falda y le tocó el culo, una quinta contó que el actor intentó quitarle un bañador en un ascensor y la sexta indicó que el actor la puso una vez en su regazo sin su consentimiento y le preguntó si alguna vez le habían hecho cierto actual sexual. «¿Me violó? Por supuesto que no, ¿me humilló? Puedes apostar a que sí», contó a la publicación.
La actitud acosadora y misógina del ex gobernador, que se separó de Maria Shriver en 2011 –no están divorciados– tras el escándalo del hijo que tuvo con la niñera de la familia, es un secreto a voces en la industria. Otro reportaje en Premiere Magazine, publicado en 2001 bajo el título Arnold, el Bárbaro, se hacía eco del comportamiento del intérprete. En el texto, Anna Richardson, una presentadora de un talk show que coincidió con Schwarzenegger durante un tour publicitario en Londres, afirmaba que cuando las cámaras dejaron de grabar su entrevista, el actor pellizcó y retorció su pezón y se rió de las incriminaciones de la presentadora. «Me fui de la habitación muy agitada, lo que más me molestó fue cómo su equipo saltó a protegerlo y nadie me pidió disculpas».
Un productor cuenta en el texto que mientras rodaban Terminator 2, vio cómo Schwarzenegger increpaba a una nueva integrante del equipo. Según afirma, puso sus manos por debajo de su blusa de seda y sacó sus pechos de la camisa. Otro observador de la escena cuenta a la publicación: «no podía creerme lo que estaba viendo. Los pezones de esta muejr estaban expuestos, y ahí estaba Arnold y otros de sus clones riéndose. Fui detrás de ella, porque escapó corriendo a refugiarse en un trailer cercano. Ella estaba histérica pero no quiso denunciarle por miedo a perder su trabajo».
El propio actor , que cuando salieron estas acusaciones en su campaña se disculpó por tener un comportamiento «juguetón» con las mujeres, no se ha cortado en entonar citas machistas en su entrevistas. Para Esquire dijo en 2003: «Cuando ves a una rubia con buenas tetas y un gran culo, te dices a ti mismo: ‘Ey, debe ser tonta o no tiene nada más que ofrecer’, que es la mayoría de veces. Por eso la gente se queda en shock cuando existe la tía lista con buenas tetas, una cara bonita y un cuerpo hermoso». Empresario de éxito, mediático, político republicano de éxito y machista. Trump ha elegido al sucesor idóneo.
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