_
_
_
_

Los trucos de ‘drag queen’ con los que se construye el irreal cuerpo que las Kardashian lucieron en París

Kylie Jenner ha vuelto a situar en el epicentro de la conversación la silueta que define al clan. Lejos de ser fruto de la genética y del entrenamiento, esta figura tiene tras de sí un arduo trabajo de corsetería y rellenos, que al ser silenciado genera peligrosos estándares de belleza inalcanzables.

Kylie Jenner saliendo del desfile de Schiaparelli en París.
Kylie Jenner saliendo del desfile de Schiaparelli en París.Getty

Por más que las Kardashian hayan sido tantas veces celebradas por haber modificado los estándares de belleza gracias a sus curvas, la realidad es que pocas veces han asumido las consecuencias que tiene mostrar unos físicos tan irreales. Una de ellas se produjo en el noveno episodio de la tercera temporada de su reality, cuando Kylie Jenner —quien intentó hacer creer al mundo que sus voluminosos labios eran fruto de los labiales de su marca, para reconocer más tarde haber recurrido a infiltraciones— comentó a Kourtney Kardashian que ante la influencia que tienen, quizás tendrían que asumir la repercusión que tienen en los estándares estéticos. “Veo a muchas chicas jóvenes en las redes y en internet que están totalmente editadas. Yo también pasé por esa etapa, pero ahora estoy mejor. Esto puede inculcar a otras personas inseguridades”, explicaba la empresaria cosmética a su hermana.

Kylie Jenner posando tras el desfile de Schiaparelli en la Semana de la Moda de París.
Kylie Jenner posando tras el desfile de Schiaparelli en la Semana de la Moda de París.Getty

Sin embargo, en el desfile de Schiaparelli en la Semana de la Moda de París, ha sido ella la que ha vuelto a dejar al mundo anonadado por transgredir los parámetros estéticos con un vestido de alta costura de la marca con el que lucía una silueta digna de Jessica Rabbit, siguiendo los nuevos parámetros de la familia: muchas curvas, pero estando mucho más delgada que en el pasado. Un físico tan irreal que recuerda a un dibujo animado y sobre el que Elena Rue Morgue reflexionó en un tuit. “El cuerpo de Kylie (como el del resto del clan) es imposible sin cirugía y mucho dinero, pero aquí en concreto lleva un tremendo corsé de reloj de arena y padding (relleno, como el de las drag) en la cadera: al caminar, se nota cómo se mueve”, señalaba en sus redes la periodista, que ha subido un vídeo en el que demuestra cómo se puede alterar la figura para simular esa silueta “reloj de arena” en unos minutos usando un corsé.

“Sé cómo funcionan las corsés perfectamente porque era gótica en el instituto, amo la época victoriana y me gusta esa silueta, por lo que me llevo encorsetado toda la vida”, explica a S Moda. “Al ver las imágenes, es cierto que pensé que Kylie había adelgazado mucho, pero la verdad es que ese cuerpo no me cuadraba, por lo que fue al verlo en movimiento cuando comprendí ante qué nos encontrábamos. Cuando la vi sentada, noté que llevaba padding, una silueta que en los años cuarenta, de la mano de Dior, se impuso, pero me pregunté cómo la gente podría saberlo al verlo. Teniendo en cuenta que tenemos la mente totalmente distorsionada sobre la realidad de los cuerpos por culpa de las redes, en las que como precisamente aclaraba Kylie, todas se estrechan las cinturas como si fueran princesas Disney, pensé que era importante aclarar que estas imágenes tienen tras de sí mucho trabajo. En la vida real, nadie tiene ese cuerpo sin un corsé, porque no son proporciones realistas”, explica la periodista, que aclara que con su vídeo ha intentando romper la distorsión que las imágenes de la pequeña del clan puede generar.

Kylie Jenner, durante la Semana de la Moda de París.
Kylie Jenner, durante la Semana de la Moda de París.Getty

Proyecto en construcción

José Luis Díaz Megías, director creativo de la firma de moda It-Spain, opina al ver las imágenes de la silueta Jessica Rabbit de Jenner que hay un importante trabajo de corsetería interior. “También hay que subrayar los materiales y los cortes del diseño, pues ayudan a conseguir esa silueta, ya que estamos hablando de un vestido de alta costura. Kylie quizás lleva algún relleno, pero no estoy seguro de que se trate de padding. En este caso no hablamos de un corsé reductor, porque sacaría más tripa, sino que se trata de uno hecho a su medida”, explica.

Virtudes Ruíz y María Vicente, cirujanas y médicas estéticas con consultas en Murcia y Lorca, opinan que más allá de cuestiones fashionistas, la silueta de las Kardashian y de las Jenner, con generosos derrieres redondeados y carentes de celulitis y hoyuelos, puede requerir pasar por el quirófano empleando prótesis específicas para glúteos. “Hablamos de una ayuda, fundamentalmente con ácido hialurónico corporal, para terminar de redondear y dar una forma bonita a esta zona, ya que con las prótesis conseguimos proyección y elevación, pero si no tienen una forma redondeada no quedan bonitas. Por eso nos ayudamos del ácido hialurónico para terminar de redondearloa, y ahora también del ácido poliláctico, con el que le damos firmeza a la piel de esta zona y mejoramos los hoyuelos de la celulitis si los hay”, aseguran.

Todos los expertos consultados coinciden en señalar la importancia de aclarar que esta imagen no es fruto ni de los genes, ni de la casualidad. Para la diseñadora de moda Maya Hansen, hay mucho trabajo y artificio detrás. “Con un corsetero se pueden hacer milagros, y hemos de tener en cuenta que detrás de las imágenes hay un equipo que trabaja para que esa imagen salga a la luz, porque es puro marketing. Yo creo que con un buen padding y con estructuras, quien tiene una talla 38, por ejemplo, puede conseguir algo similar, pero hay que aclarar que hay mucho trabajo interior en este tipo de prendas. El resultado de lo que vemos durante unos instantes realmente es el trabajo de meses de trabajo sobre su cuerpo, con diversas sesiones para probarle y que todo encaje como un guante. En la alta costura hablamos de una tarea que puede alargarse a lo largo de meses”, dice la diseñadora, que vistió a Jenner cuando celebró sus 18 años.

José Luis Díaz Megías también opina que el trabajo que hay detrás de la imagen es intenso. “Hay que poner en marcha un entrenamiento de corsetería. Si te pones un corsé cada día, tu cuerpo, al cabo de tres meses, va cogiendo esa forma. Por supuesto, eso no quiere decir que te lo quites y te quede esa forma, pero sí se nota. Lo que hay que saber es que debajo de un vestido de esas características suele haber un corsé de base o un bustier corsé. En definitiva, quienes viven de su cuerpo, como las Kardashian o las Jenner, pueden conseguir esa silueta con un entrenamiento, con corsetería, con cirugía… Al final, su figura es su herramienta de trabajo, si llegan a estos extremos, es porque le sacan un beneficio”, dice. Díaz Megías no duda en diferenciar este look del que lució Kim Kardashian en la gala MET emulando a Marilyn Monroe y desatando la polémica. “El vestido de Kim era un diseño con un tejido suave transparente, por lo que en ese caso, habría sido imposible meter corsetería, porque se marcaría el ballenaje. Posiblemente llevaba un catsuit reductor que aprieta y moldea. De haber recurrido a la corsetería, habría dado un toque de ortopedia. Las Kardashian, cuando apuestan por poner fajas sobre fajas, han de poner luego por encima una media, como hacen las drags, para que no se noten los cortes”, explica.

Kim Kardashian, a la salida del desfile de Victoria Beckham.
Kim Kardashian, a la salida del desfile de Victoria Beckham.Getty

Un corsé ‘ad hoc’

Ambos diseñadores coinciden en pensar que Jenner no luce un corsé cualquiera, sino uno creado exclusivamente para ella. Preguntamos a Hansen cómo se crea este tipo de diseños personalizados para la silueta de una clienta conocida. “Lo que hacemos es pedirle unas fotografías sin rostro y una tabla de medidas tomadas por un profesional. De hecho, a veces incluso pedimos que sean dos tipos de modistos diferentes los que tomen las medidas, pues suele haber diferencias de opiniones sobre cómo se toman y así podremos sacar una media más o menos real de sus medidas. Con las fotografías de perfil, de frente, de espaldas y en ocasiones, con un vídeo 360º, así como con la estatura, que es algo que marca los talles (junto con la altura del pecho, es una medida básica para un corsetero) ya puedes empezar a moldear y trabajar. Es esencial preguntar qué efecto quiere lograr y si quiere alguna medida de reducción en concreto. Si por ejemplo quiere un tightlacing, que se usaba en los siglos XVII y XVIII (Mister Pearl fue el maestro), hablamos de corsetería extrema, y ahí nos metemos en un patronaje extremo de reducción. Por eso es esencial saber cuántas tallas quiere reducir y cuantos centímetros de cintura desea. Tenemos maniquies flexibles rusos sobre los que pruebas el corsé y es como si se lo estuvieras poniendo a una persona real”, explica. “Al final, es una obra de arquitectura sobre el cuerpo. Somos los diseñadores que más nos parecemos a los arquitectos”, señala.

El problema de la silueta que defienden las Kardashian y de cómo ha influenciado en la imagen corporal de las mujeres es la forma en la que han sugerido que su apariencia es fruto del entrenamiento y de la cirugía, como advierte Jessi Kneeland, autora de Body Neutral: A Revolutionary Guide. Al hacerlo, eliminan tanto los recursos como los privilegios de la ecuación. “Es importante dejar de sobrevalorar y poner siempre el foco de lo válido en lo corporal y/o estético. No se trata de si es mejor o más real un cuerpo curvy o un cuerpo más esbelto, porque reales son todos y válidos, sino dejar de darle tantísima atención e importancia. Aunque sea con la intención de dar un mensaje positivo, a veces genera más ruido e incluso nuevas fobias o rechazos. Esa insatisfacción por no alcanzar esos referentes deseados genera que se busquen recursos de todo tipo para modificar el cuerpo, a veces por encima de la salud. No debemos confundir el querer vernos bien, disfrutar de nuestro cuerpo y estética, con alcanzar referentes que además son imposibles por más que hagas mucho ejercicio o cambies tu alimentación”, dice para terminar Blanca Torrado, psicóloga de Espacio Psiconutrición.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_