Manteco, el proveedor de lana italiana de lujo que fabrica abrigos de 100 euros para Mango o Zara

En su empeño por crear una imagen y unos diseños dignos de una gran firma –los mejores fotógrafos de la industria disparan unas campañas salpicadas por prendas que siguen las últimas tendencias–, las cadenas de moda pronta se han puesto las pilas para dar el salto caulitativo también en la calidad de sus prendas. No solo es posible encontrar abrigos de piel a mil euros en una marca de Inditex, también es factible comprar algunas piezas elaboradas por los mismos proveedores que dan soporte a firmas cuyas etiquetas superan en varios ceros los precios de Zara o Mango. Es el caso de algunos abrigos que este otoño podemos encontrar en las tiendas de estas dos marcas y que llevan un distintivo que los diferencia del resto: el sello Manteco.

No es la primera vez que este histórico tejedor italiano, proveedor de confianza de marcas premium y de lujo, se cuela en el catálogo de cadenas low cost. Desde hace un par de inviernos su etiqueta se ha dejado ver en contados abrigos de Mango, Zara o H&M, pero mientras que antes las piezas elegidas tenían un precio considerablemente superior al resto del catálogo llegando a los 500 euros, este año es posible comprar un abrigo de lana Manteco por 119,99 euros (Mango) o 99,95 (Zara). Distinguir estas piezas del resto de la colección ni siquiera requiere de tener buen ojo ni conocimientos textiles: ambas marcas lo aclaran en la descripción disponible en la tienda online y lo reafirman cosiendo el distintivo Manteco en el interior del abrigo. «MWool by Manteco es lo último en lana reciclada. Esta lana de lujo de fabricación ‘verde’ está confeccionada 100% en Italia utilizando tecnología sostenible y siguiendo la trazabilidad en su proceso de producción», puede leerse en la etiqueta de uno de estos abrigos.

La historia de Manteco, que elabora su lana en Prato (Toscana), cuna de la producción textil italiana a pesar de que los últimos años la ciudad cope titulares por la invasión de fabricantes chinos, se remonta a 1943. Fundada por Enzo Mantellassi en una hilandería destruida por la II Guerra Mundial, a día de hoy sigue en manos de la familia fundadora y es capitaneada por la tercera generación. Considerada una de las grandes expertas en lana del mundo, los últimos tiempos ha apostado por la moda circular reciclando los descartes de producción de sus proveedores para fabricar nueva lana reciclada. Contar con su propia fábrica les permite, además, garantizar una mejor trazabilidad, una de las preocupaciones y objetivos principales de Manteco. «Nuestras materias primas son controladas y rastreadas hasta la finca de origen», explica Marco Mantellassi, CEO de la empresa y nieto del fundador. Bajo su batuta y la de su hermano Matteo, Manteco ha logrado aumentar su facturación en diez años de 20 a 90 millones de euros, según el diario italiano L’Economia.

Su profundo conocimiento y saber hacer en la producción de lana lo ha convertido en uno de los mayores fabricantes laneros de Europa, cuarta mayor compañía textil italiana y proveedor de firmas de lujo pertenecientes a conglomerados como LVMH o Kering, así como de etiquetas de moda pronta. Según publicaba Modaes, «además de sus tres laboratorios, Manteco cuenta con oficinas de representación en Tokio, Nueva York, Barcelona y Estocolmo, y vende a 47 mercados». ¿El resultado? Una producción de más de ocho millones de metros de lana al año, aunque también confeccionan otro tipo de tejidos.

Aunque sus comunicaciones tienen un tono corporativo, en su cuenta de Instagram es posible comprobar cómo Alessandro Michele, director creativo de Gucci, o Carlo Mazzi, CEO de Prada, son algunos de los grandes nombres de la industria que han visitado sus instalaciones e incluso informan del día que el príncipe Harry llevó uno de sus abrigos.