Los duros ataques a Ángela Ponce, la transexual española candidata a Miss Universo

La vida de la modelo Ángela Ponce, desde que el pasado 29 de junio se alzara como la representante de nuestro país en el próximo certamen de Miss Universo, no ha vuelto a ser la misma. En España no ha habido ningún tipo de controversia por el hecho de que sea una mujer transexual, principalmente porque el concurso de belleza en 2012 cambió sus reglas y, desde entonces, permite participar a las mujeres transgénero siempre y cuando en su país de origen sea reconocido legalmente su cambio de nombre. Pero parece ser que fuera de nuestras fronteras esta necesaria evolución, de máxima importancia tanto para la visualización como para la normalización del colectivo, en vez de aplaudirse está siendo recibida de una forma tristemente muy distinta.

“En mi caso no debo ganar por mí, sino por toda la gente de España y alrededor del mundo para que la situación cambie. Pero ya no sólo por el colectivo LGTBI, sino por simple humanidad porque todos vamos a ser padres y no sabemos cuándo nos va a tocar. No soy una Miss más que quiere la paz en el mundo, ya que tengo un mensaje muy poderoso de tolerancia, ilusión, respeto, amor por uno mismo y amor por los demás. Quiero hacer todo eso con la bandera de España”, contaba Ponce a S Moda escasas horas antes de su victoria el pasado verano. Sin embargo, lo que por entonces no se podía imaginar es que en días, semanas y meses posteriores su futura participación en el concurso se vería cuestionada por un sinfín de comentarios que destilan una transfobia incuestionable.

Sin ir más lejos, algunos medios de comunicación latinoamericanos no han cesado de publicar durante las últimas semanas, día sí y día también, todo tipo de informaciones de dudoso gusto acerca de la modelo. Desde fotos de cuando era menor, pasando por imágenes sin maquillar y todo tipo de datos que han catapultado a Ponce como una de las personas más mediáticas y buscadas actualmente en el continente americano, donde se vive con muchísimo más fervor que aquí todo lo relacionado con Miss Universo. Las televisiones de México, Argentina o Venezuela, sin ir más lejos, han dedicado horas de debate en prime time a su caso. E, incluso, a raíz de todo ello han surgido personajes satélites como el del modelo Gabriel Rodríguez, con quien los medios de comunicación latinoamericanos han relacionado sentimentalmente con Ponce. Rodríguez, en el programa Ventaneando de la mexicana TV Azteca, pese a negar dicha relación ha defendido públicamente a su amiga ante las cámaras afirmando que “ella ya ha ganado, es ganadora de su propia vida y pese a quien pese, ella es una mujer”.

Asimismo, como pueden imaginarse, cientos de usuarios de Twitter de fuera de España han creado todo tipo de memes deleznables que cuestionan su feminidad y su validez en el concurso, dejando más que claro lo que la propia Ponce ya decía, que “aún queda muchísimo por hacer” para que una mujer transexual pueda vivir su vida libremente y no se tenga que ver cuestionada por mentes arcaicas que desconocen que estamos en el siglo XXI.

Ahí están las opiniones vertidas por diversas compañeras de profesión. La ex aspirante a Miss Universo por Venezuela en 2001, Vivian Sleiman, hace escasos días dijo que “aunque me llamen chapada a la antigua, creo que debe haber un concurso, que ya existe, para los transgéneros y otro para chicas”. Estas palabras se suman a las declaraciones en contra de Ponce que anteriormente verbalizaron la aspirante a Miss Perú 2018 Lucía Arellano, la mexicana Lupita Jones (ex Miss Universo y directora en su país del certamen) o la colombiana Valeria Morales, quien competirá con Ponce este próximo 17 de diciembre en Bangkok por el título. Precisamente, con el acertado objetivo de no entrar en polémicas, la española contestó a Morales después de que ésta comentara “un reinado de belleza, como es Miss Universo, es para mujeres que nacimos mujeres. Y creo que para ella también sería una desventaja. Por eso hay que respetarla, pero no compartirlo”. La respuesta de la sevillana vía Instagram no se hizo esperar: “Yo sí la respeto y respeto que esa sea su opinión, pero no quiero llegar a Miss Universo con ningún prejuicio hacia ella o hacia ninguna otra compañera.  Mi finalidad es dar a conocer mi realidad y hablar al mundo un poco sobre la educación en la diversidad que es tan escasa, un factor importante y que sin duda terminarían con tanto bullying, prejuicios y violencia. Pido respeto, tanto para mi compañera como para mí”.

La española no será la única mujer transexual en presentarse por vez primera a la final de Miss Universo el mes que viene, ya que el pasado 6 de octubre Belguun Batsukh fue elegida Miss Mongolia y también competirá por el mismo título. El día que nada esto sea noticia, sin duda, Ponce habrá cumplido su principal objetivo.