¿Las blogueras también retocan su físico con Photoshop?
La editora de ‘Do The Hotpants’ ha confesado que su cuerpo no es tan perfecto como hacía creer. Hablamos con ella y con otras blogueras nacionales para saber hasta qué punto editan sus fotos.
'Fotos que ojalá no hubiera retocado con Photoshop'. Bajo este título Dana Suchow, editora del blog de moda Do The Hotpants, ha decidido recopilar las imágenes que decidió editar antes de que vieran la luz en su bitácora. “En mi misión de levantar el velo que actualmente nos asfixia a las mujeres, me di cuenta de que no he sido del todo sincera. Lo siento. Precisamente porque quiero ser lo más transparente posible con vosotras, he decidido mostrar los casos en los que utilicé Photoshop para distorsionar y cambiar mi cuerpo”, reza el comienzo del post en el que Suchow hace la confesión.
Las fotos publicadas, que pertenecen a los comienzos del blog, destacan mediante flechas rojas las zonas del cuerpo que decidió transformar con el programa de retoque. Disimular tripa es la corrección que más ha utilizado, seguida de atenuar la forma y anchura de sus caderas así como las imperfecciones de su rostro, sus mayores inseguridades. “Decidí contar la verdad porque necesito que mis lectoras sepan que no soy perfecta. Muchos comentarios me dicen que soy hermosa o que tengo un gran cuerpo cuando no es así. Quiero que sepan que me identifico con ellas y que no deberían ponerme en un pedestal porque soy humana y tengo defectos”, confiesa a S Moda.
Las razones que la llevaron a darle al Photoshop son claras: “Las blogueras tenemos casi tanta presión como las modelos. En cuanto se añade la palabra 'moda' a cualquier cosa, aparece la imposición de la perfección. Además, los blogs de moda son un gran negocio. Las empresas nos pagan para aumentar sus ventas y eso nos presiona”, explica.
Ahora, sin embargo, Suchow busca otro tipo de reconocimiento. Su compromiso con las mujeres la ha impulsado a sincerarse con las que la siguen. “Me considero 100% feminista. Cualquier mujer que se beneficia del liderazgo femenino, del final de la 'cultura dieta', del ocaso de la vergüenza del cuerpo o del fin de la sexualidad como algo embarazoso, es una feminista. Esto no quiere decir que no depile mis axilas o que queme sostenes los fines de semana. Simplemente lucho por la igualdad de las mujeres”. El mensaje que lanza a sus lectoras con su confesión es, según resume en su post, que sean ellas mismas y que se quieran tal como son sin compararse con las demás.
«Tengo defectos y necesito que mis lectoras lo sepan», confiesa la autora de ‘Do The Hotpants’.
Cortesía de ‘Do The Hotpants’
«No creas todo lo que ves», uno de los mensaje que Dana envía a sus lectoras.
Cortesía de ‘Do The Hotpants’
¿Todas las blogueras retocan su físico?
Larga es la lista de firmas que marcan el 'Thigh Gap' de sus modelos, estrechan su cintura o alargan sus brazos en la fase de postproducción. También es amplia la relación de celebrities que pasan sus fotos por un programa de retoque antes de compartirlas con sus seguidores. Y más generosa es aún la nónima de las marcas y famosos que han tenido que pedir disculpas por pasarse con el licuado hasta rozar el más absoluto desastre.
La confesión de Suchow desata la curiosidad por saber hasta qué punto transforman sus cuerpos sus compañeras de profesión. A pesar de que el concepto 'blog de moda' pasa por defender que no es necesario un cuerpo ni una cara de modelo para interpretar y comunicar la moda, muchas de ellas tiran de retoque para parecerlo. Trendencias apuntaba hace unos meses que Danielle Bernstein, del blog We Wore What, retoca el grosor de sus piernas. Las evidencias de sus fotos en Instagram (suelos que no siguen líneas rectas o paredes movidas alrededor de sus caderas o extremidades) así lo confirman, según apunta el portal.
Hay líneas que no cuadran en las fotos que la editora de ‘Who What Wear’ sube a Instagram.
Instagram @whowhatwear
Algunas de ellas no tienen reparos en confesarlo: “Por supuesto que uso Photoshop y me lo paso genial haciéndolo. Las blogueras de moda no somos perfectas, tenemos defectos (granitos y demás) y si pusiéramos las fotos sin tratar no trabajaríamos con las marcas. No lo veo nada grave siempre que no hagas cambios radicales o intestes aparentar lo que no eres”, nos cuenta la polifacética Miranda Makaroff, diseñadora y editora del blog Hermanas Miranda.
“Pongo la mano en el fuego porque todas las blogueras lo hacemos. No es ningún drama”, continúa Makaroff. La propia Suchow también afirma que conoce a muchas compañeras que lo hacen: “Es su decisión y no quiero nombrarlas ni avergonzarlas. Sin embargo, sí me parecen aberrantes los estándares de belleza inalcanzables que se promueven. Esa es la razón por la que sienten que deben mejorar su aspecto con ayuda de programas y aplicaciones”.
Sara Escudero, editora de Collage Vintage, defiende otra postura: “Conozco a chicas que se retocan pero tampoco creo que sea lo más frecuente. Personalmente, estoy a favor de la naturalidad de las editoras y del uso de Photoshop solo para mejorar la estética de la foto (exposición, saturación, etc). Nunca retoco mi aspecto físico, ni mi altura, ni mi volumen. Me gusta mostrarme tal y como soy a mis lectoras aunque, por supuesto, seleccione las fotos más favorecedoras”. En su caso, afirma que no se ha sentido presionada por las marcas. Según su experiencia, aquellas que han querido trabajar con ella lo han hecho por su naturalidad y estilo, no por sus medidas: “Cuando una firma quiere a una modelo la contrata y hace una publicidad totalmente distinta”, termina.
Aida Domenech, autora de Dulceida, mantiene una postura a medio camino entre la de sus dos compañeras: "Me encanta Photoshop para cambiar el aspecto de las fotografías pero no el de mi cuerpo. Creo que nadie necesita mejorar su físico sino aprender a quererse tal y como es. Sin embargo, a veces me he quitado algún granito, ¿quién no lo ha hecho?"
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