Kylie Minogue, el juguete favorito de los diseñadores de moda

Pocos juguetes más agradecidos pueden caer en las manos de un diseñador que una estrella del pop. Y a juzgar por cómo hablan todos los que han trabajado con ella, ninguna es comparable en pasión y complicidad a Kylie Minogue.

Quizás por eso la australiana no ha tenido problemas para conseguir que algunos de los nombres más mediáticos de la industria hayan colaborado desinteresadamente en la preparación de ‘Kylie /Fashion’, libro que acaba de publicarse que “muestra mi relación con algunos de los mayores talentos de la moda a lo largo de mi carrera”, asegura la propia cantante. “Diseñadores y maisons con las que he trabajado a lo largo de todos estos años que me hacen sentir muy orgullosa cuando los veo a todos reunidos en estas páginas que suponen un magnífico viaje al pasado a través de fotografías, muchas de ellas inéditas, rescatadas de mi archivo personal”.
 

Kylie/Fashion (Thames & Hudson)

Un jugoso volumen q que llega casi como traca final del ‘K25’, acrónimo que este 2012 ha englobado todo lo relacionado a los 25 años que lleva la Minogue dedicada a la música y que ha celebrado con caprichos como el Antitour, una serie de conciertos íntimos para fans en los que solo cantaba rarezas y caras B; o ‘The Abbey Road Sessions’, disco en el que ha reinventado sus grandes éxitos acompañada de una orquesta. Dos maneras únicas y distintas de acercarse a la biografía de esta estrella.

Y es que una vida puede ser contada de muchas maneras, aunque hacerlo a través de la moda convierte a Kylie en más icono que nunca. Al menos así habla de ella Jean Paul Gaultier, encargado del prólogo del libro y autor de algunos de los modelos más extravagantes lucidos por Minogue sobre el escenario. De hecho, uno de ellos, fue utilizado como imagen principal de los anuncios que promocionaron en ciudades como Montreal o San Francisco la retrospectiva dedicada al diseñador antes de su llegada a la Fundación Mapfre de Madrid.

Claro que el francés no es el único que desfila por estas páginas. Stella McCartney, Giles Deacon, Christian Louboutin, Karl Lagerfeld o John Galliano son sólo algunos de los diseñadores que, además de crear vestuario para sus actuaciones y vídeos musicales, han dedicado unas palabras en exclusiva a la Minogue. Creadores que, en ocasiones, superan la simple relación profesional y se convierten en amigos íntimos como  los italianos Dolce&Gabbana, “siempre encantados de crear algo especial para nuestra pequeña princesa”, aseguran. Un favor que ella les devuelve con detalles como actuar por sorpresa la semana pasada en el fiestón que Stefano Gabbana organizó en Los Ángeles con motivo de su 50 cumpleaños.

Pero los consagrados no son los únicos creadores que tienen a Kylie en su agenda. Tiempo antes de que el mundo se rindiera a las extrañas geometrías del británico Gareth Pugh, Kylie ya lució sus diseños en la gira ‘Showgirl’ y en el vídeo de ‘In My Arms’. Aunque en este caso es justo reconocer que el culpable no lo es tanto ella como William Baker, su director creativo y estilista a la par que mejor amigo, ‘gay husband’ y, por supuesto, co-autor de este libro.
Un chico que Minogue conoció siendo dependiente de una tienda de Vivienne Westwood que, después de bombardearla con ideas para renovar su imagen, demostró su buen tino con, entre otros, la elección de looks esenciales para entender la carrera de Kylie como el traje blanco diseñado por Fee Doran para el vídeo de ‘Can’t Get You Out Of My Head’ o los famosos goldenpants comprados en un mercadillo que lució en el vídeo de ‘Spinning Around’.

Piezas que, por cierto, ocuparon un lugar muy destacado dentro de ‘Kylie: The Exhibition’, aquella exposición organizada por el londinense Victoria&Albert Museum en 2007 en la que se mostraban vestidos y accesorios utilizados por la cantante que ya daban una idea de su pasión desmedida por la moda. La misma que la ha llevado a enseñar en Twitter día sí y día también los zapatos que lleva bajo el hagstag #shoesoftheday o analizar sus estilismos diarios en una sección especial de su web oficial.

Y eso que la mayor alegría que le ha dado la industria no le llegó en ninguna caja ni ninguna bolsa, sino en forma de hombre de 1’90 metros de altura: Andrés Velencoso, su pareja. Pero esa ya es otra historia.

Kylie/Fashion (Thames & Hudson)

Kylie/Fashion (Thames & Hudson)

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