«Puta gorda» y «feminazi»: el ciberacoso a Penny Jay tras ir a ‘La Resistencia’

¿Qué pasa cuando una mujer le dice a a uno de los jóvenes cómicos españoles más queridos por la audiencia que su show no es tan «cero patriarcal» como cree? La respuesta la conoce desde hace unos días la cómica Penny Jay. Los comentarios e interacciones que ha recibido tras su paso por La Resistencia esta misma semana ejemplifican a qué se expone una mujer cuando defiende, aunque sea de buen rollo y entre risas, una perspectiva de género en gremios en los que ésta suele brillar por su ausencia, como es el caso de la comedia y los stand ups. «Puta», «gorda», «feminazi» o «bicho» son algunos de los adjetivos más destacados (y aplaudidos) por los usuarios que han comentado en YouTube y redes la entrevista de Broncano a Jay y Asaari Bigang en el programa de Movistar.

Las cómicas acudieron esta semana como invitadas al show para promocionar su espectáculo de monólogos de micro abierto Riot Comedy. En un momento del encuentro, Jay decidió ofrecer una serie de regalos a David Broncano, conductor del programa. Cuando le entregó la camiseta que decía «De ser un señoro también se sale», Jay le dijo: «El tercer regalo es porque dices que este programa es cero patriarcal y lo es relativamente, porque no hay colaboradoras», criticó, enfatizando el hecho de la nula existencia de mujeres como secundarias habituales en el show. La artista lo dijo en un ambiente relajado. «Tratáis con respeto a las invitadas, eso sí», destacó entre risas, y añadió: «Pablo Motos no lo hace. Pablo Motos pregunta a las invitadas si duermen con bragas o no. Por el esfuerzo que hacéis y porque poco a poco estáis saliendo de esa ideología un poco rancia, te regalo una camiseta que dice De ser un señoro también se sale».

El apunte de apenas un minuto de una entrevista mucho más extensa ha causado una campaña de ciberacoso hacia la cómica, que está recibiendo una oleada de insultos en redes por su apunte en el programa. A Jay no le sorprenden. «¿Qué cómo me siento? Pues te respondo con el recurrido meme de Internet: Dissapointed but not suprised (Decepcionada pero no sorprendida). Al fin y al cabo el gran público del programa es forocochero y tenía que pasar. España es un país machista y la mayor parte de los fans de Broncano son asiduos de Forocoches. Y eso que no fui ni un 10% de lo provocadora que suelo ser», indica al otro lado del teléfono.  «Que me llamen ‘puta gorda feminazi’ es una evidencia más de esta reacción machista habitual. Se ataca al físico de una mujer por hacer una crítica constructiva de un programa que a mí me gusta y ellos aman», indica la cómica, cuyo espectáculo llega con todas las entradas vendidas mañana en Barcelona.

Jay, que remarca en todo momento que en La Resistencia sí que vislumbra una «buena intención» respecto a la inclusión de voces cómicas femeninas («a la monologuista Eva Soriano la ficharon después de verla en Riot Comedy«), explica a S Moda las trabas que se ha encontrado en el sector más allá del programa de Broncano. Material no le falta. «Yo todo esto lo guardo y lo digiero para mi trabajo. A finales de enero subiremos a YouTube un monólogo de Riot Comedy donde explico cómo desde el propio sector se nos ha menospreciado. Ahora tengo ciberacoso, pero también nos han rechazado en salas o nos han puesto de vuelta y media por hacer un espectáculo porque nos juntamos ‘solas’, sin hombres. Nos han llegado a decir que hacíamos un ‘show privilegiado’ por haber creado uno, precisamente, en el que podíamos tener voz».

Sobre por qué provoca tanta ira que una mujer diga la palabra patriarcado en directo en televisión, Jay tiene clara la respuesta. «Porque se sigue percibiendo como un insulto o un ataque cuando en realidad lo que se está haciendo es señalar un comportamiento a mejorar. Cuando personas como Puto Chino Maricón dicen que si digo que ‘voy a bajar al chino a comprar’ es racista, debo reflexionar sobre ello e intentar dejar de hacerlo. Pero la mayoría opta por ponerse a la defensiva. Si señalas, se ponen en guardia. No quieren reflexionar o evaluar sus propios comportamientos».