Paparazzi busca celebrity despistada

Vanessa Hudgens y Kim Kardashian tienen en común ser las últimas famosas desnudadas por los paparazzi. Es poco probable que las fotos de sus nalgas y pechos levanten ampollas, como sucedió con algunas imágenes de traseros captadas en los partidos del volley playa femenino durante los Juegos Olímpicos. Pero la prensa rosa y amarilla publica a diario imágenes similares a las de esas atletas, aunque protagonizadas por famosas.

La demanda de esa clase de fotos es tal que algunas agencias de fotografía ofrecen más de 1.200 clasificadas con las palabras clave “paparazzi” y “tetas”. El resultado se dispara hasta las 2.500 si cambiamos el segundo término por “culo”. Muchas no son otra cosa que recortes realizados a un retrato de cuerpo entero. Un ejemplo reciente son las tomas del culo de Katy Perry que aparecieron en varios medios de todo el mundo. En una de ellas la agencia que vendió las imágenes optó por aplicar un reencuadre a la foto original, disparada con teleobjetivo, para que viésemos con más detalle el trasero de la cantante.

El fenómeno de mostrar primerísimos planos de famosas está relacionado con que los fotógrafos que las persiguen las ven cada vez más como un mero objeto. De hecho, muchos paparazzis más que mostrar la vida privada de una celebrity sólo buscan cazar gestos o rasgos físicos suyos con el máximo detalle posible.

Estos fotógrafos ya no suelen correr detrás del famoso de turno como hacía Ron Galella con Jackie Kennedy. La tecnología actual les permite disparar discretamente ráfagas de fotos de alta resolución sin que apenas tengan que reparar en lo que están viendo. Es delante del ordenador, al vaciar las tarjetas de memoria de la cámara, cuando seleccionan, recortan y aumentan la nitidez de las imágenes para sacarles todo el jugo posible.

Una de las imágenes de vóley playa femenino difundidas en los Juegos Olímpicos.

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Un proceso que ni tan siquiera tiene que ser realizado por el autor de la foto, pues las propias agencias que compran el material gráfico pueden encargarse de obtener planos fabricados a posteriori. Es así como podemos ver que Miley Cyrus a veces no usa bragas o el color de las que gasta Miranda Kerr. La fórmula proporciona un gran número de visitas a los blogs y medios que difunden esas fotos, como es el caso del Daily Mail. La edición digital de ese periódico amarillista inglés logró convertirse hace pocos meses en la web de información más frecuentada de internet. Lo paradójico de ese método para fabricar primerísimos planos -prohibidos en las sesiones de fotografía de moda- es que se usan técnicas tan sofisticadas como las empleadas para ocultar digitalmente las imperfecciones en los posados que protagonizan las estrellas del momento. En uno y en otro caso cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia.

Las braguitas de Miranda Kerr quedan al descubierto si se amplía la foto al tamaño adecuado.

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El escote de Kim Kardashian ha llamado más la atención del fotógrafo que su propio rostro.

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