Entrevista surrealista a Rock Hudson, por la Terremoto de Alcorcón
El actor contesta desde el más allá a la vedette española con menos pelos en la lengua.
¿Te puedo llamar Roy?
Es por darle un tonito más personal al cuestionario… La verdad es que no fue idea mía. Para endurecer un poco al actor, mi repre decidió ponerme Rock y además casarme con su secretaria Phyllis. ¿Te importa si fumo?
A ver Roy, que ya te lo prohibieron en el 75.
Mujer, si total ya… Pues sí: me casaron. Pero estando yo descansando en el Pacífico, allá por 2006, mi exmujer decidió hacer pública la que había sido su inclinación sexual hacia su mismo sexo.
¡Menudo papelón! Como los papeles que tenían que pegarte en las paredes del set en Dinastía para que te supieras tu texto…
¡Ay, sí, chica! ¿Sabías que mi primera frase en el celuloide hubo que repetirla 40 veces? Ahora, ¿cómo salía de guapo, eh? ¿Cómo? ¿Tengo o no razón?
Cuando la tienes, la tienes. Con quien no repetiste fue con Marlon Brando ni con Burt Lancaster…
Yo he venido aquí a hablar de mí mismo.
Pues, nada, simplemente te doy las gracias por cambiarle el rostro al mal aislado de lo que se llamó «pervertidos sodomitas».
De nada, mujer; de nada. En mi próxima vida interpretaré Ben-Hur y me dejaré de gais «armarizados». ¡Brindo por ello!
¡Venga, una copita! Pero la última, ¿eh? Que no debes, Roy, que no debes…
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