El Rey también se apunta al revival de las Carrera

Las gafas de sol tienen significado. No es lo mismo lucir unas Rayban Wayfarer que unas Persol 714, las preferidas de Steve McQueen o unas Oakley a lo Lance Armstrong. El Rey tuvo recientemente un accidente doméstico que le dejó un ojo morado y el domingo, en el partido de la copa Davis que enfrentaba a Nadal con Del Potro, lució unas Carrera para tapar el golpe.

Las míticas gafas de sol Carrera se relacionan con el mundo del motor (la edición Porche Carrera es un clásico) y también con el mundo del esquí. Ninguno de estos entornos es ajeno al rey Juan Carlos. De hecho, seguro que al primo de una amiga tuya le recogió del suelo en una pista de Baqueira el mismísimo Rey y al primo de otro amigo le auxilió un motorista cuando se quedó tirado en una cuneta y al quitarse el caso, voilá, el Rey again.

Leyendas urbanas aparte parece que el Rey confirma el revival de las Carrera. En la estela de Rayban y su invasión de Wayfarer la marca de origen austriaco (ahora italiana) decidió resucitar la marca y sacarla de su nicho de mercado para convertirla en un accesorio de moda. Allá por 2009 Lady Gaga lucía unas blancas en Bad Romance y ya se sabe que todo lo que toca Lady Gaga se convierte en un éxito. Rihanna, Kanye West, Alicia Keys, Gwen Stefani, Taylor Momsem, Cristiano Ronaldo se apuntaron a la moda. Ahora la tendencia se vuelve real.