El mejor verano que puedes vivir está en el Instagram de Jacquemus
O por qué a sus seguidores nos entran unas ganas tremendas de que el diseñador nos adopte en sus vacaciones.
Aquellos directivos de publicidad que idearon (y abusaron) de lo del Mediterráneamente hace ya unos años deberían contactar urgentemente con Jacquemus para hacerse con nuevas ideas y estampas veraniegas. No existe mejor embajador del hedonismo estival que el de su cuenta de Instagram. Sentenciar de esta forma, teniendo en cuenta los niveles de pretenciosidad y perfección que se dan en las redes de los pesos pesados del gremio, podría sonar aventurado, pero la vida veraniega de Simon Porte, sus retazos vitales, levantan auténticos suspiros de envidia entre sus seguidores. Followers a los que poco les importa los paseos en velero de Mert Alas, subirse al yate de Valentino, las enémisa foto de la costa almafitana de la influencer de turno o la piscina con las iniciales en el fondo de Anna Dello Russo. Ellos son más de la espontaneidad de Simon Porte. La genialidad de Jacquemus reside en una alegría de vivir y exaltación de la sencillez que ni los ideólogos del hygge podían haber estimado. El mejor verano está en el Instagram de Jacquemus y aquí están las pruebas:
Quién quiere un vídeo hiperestético con coreografía a lo fiestón en el MET si puedes subir uno bailando con tu abuela:
¿Necesitas una cesta? Simon ha ido directito a Marruecos a buscártela:
¿Unos bailes al atardecer en la Costa Azul? Con Simon Porte, Likke Li nunca pasa de moda:
Un chapuzón, ¿te animas? Te lo puedes dar aquí:
O aquí:
O aquí, ¡refréscate con Simon en una barca hinchable!
¿Grand Palais? Te monto el debut de mi desfile masculino en la playa que para eso estamos en verano, hermosura.
Te hace la mejor retransmisión en directo de la final del Mundial:
También es un experto en anunciar el inicio de sus vacaciones, aunque su vida parezca una estampa estival perpetua. Confirmado, no hay mejor verano que el del Instagram de Jacquemus.
