¿Por qué todo el mundo está hablando de maquillaje corporal?
Kim Kardashian lo ha convertido en tendencia de belleza con la colección que acaba de lanzar, pero las bases de maquillaje para el cuerpo ya existían y siguen sin librarse de la polémica.
Hace mucho que Kim Kardashian dejó de ser solo una celebrity carne de reality. Ahora da charlas en la Casa Blanca y estudia para ser abogada, pero su faceta altruista tan solo es la guinda del pastel: lo que en realidad es Kim es una auténtica empresaria que se ha propuesto revolucionar el mercado de la belleza –siguiendo de cerca y adelantando por la derecha a su hermana pequeña Kylie Jenner, que ya hiciera lo propio con sus famosos labiales-.
Su última hazaña (además de Kimono, una marca de ropa interior y fajas por la que se le ha acusado de apropiación cultural) ha sido lanzar una colección de maquillaje corporal bajo el paraguas de su firma KKW Beauty: “Muy emocionada de anunciar que mi colección cuerpo de KKW Beauty está llegando!!! La nueva línea incluye base de maquillaje corporal, iluminadores, polvos fijadores y brocha. He estado trabajando en estas fórmulas durante un año y estoy muy feliz de lo cremosas que han resultado. Puedes utilizarlas juntas o aplicarlas individualmente para alcanzar la cobertura y el brillo que tú quieras. No puedo esperar a que probéis la colección!!”
Y entonces ¡boom!: la colección salió a la venta en exclusiva a través de su web el pasado día 21 de junio y, por supuesto, se agotó en escasas horas. Sin embargo, lo que aún sigue rondando muchas cabezas y absolutamente todos los feeds de Instagram son los vídeos que ella misma compartió utilizando sus nuevos productos. El primero, maquillando sus propias piernas y contando cómo con su nueva colección consigue ocultar la psoriasis que padece desde hace diez años. El segundo, haciendo lo propio con los brazos de su abuela –de 85 años- y rejuveneciéndolos al tapar venas visibles y marcas de la edad.
No era de extrañar, dados los hechos, que los comentarios y las críticas –tan habituales sobre todo lo que toca el klan Kardashian- se hicieran oír. Una de las más implicadas, la actriz reconocida por su papel en The Good Place Jameela Jamil: “Esto es duro. Dios maldiga el trabajo de quitarse todo esto antes de irte a la cama para no destrizar tus sábanas… Preferiría simplemente hacer las paces con mi millón de estrías y mis eccemas. Quitarme la máscara de pestañas ya es suficiente incordio. Ahorra dinero y tiempo y date un maldito respiro».
Su visión, tal y como ella misma ha explicado, tiene que ver con el porqué de que a las mujeres se les exija estar siempre perfectas y con la contradicción que supone este hábito de maquillaje en una época en la que se abraza más que nunca la autoaceptación y el body positive… Pero, ¿qué porcentaje de culpa recae sobre Kim Kardashian alrededor de todo este asunto? Pues uno ínfimo. Porque, aunque indiscutiblemente ella sea prescriptora de tendencias, lo que también ha hecho en esta ocasión es visibilizar una enfermedad como la suya y ofrecer apoyo a otras mujeres que puedan sufrir, como ella, afecciones en la piel.
Y es que, efectivamente, esta vez no ha sido ella la primera en descubrir la panacea. A pesar del año de investigaciones que asegura haber llevado a cabo, los productos para maquillar el cuerpo y cubrir imperfecciones en otras zonas además del rosto ya existen desde hace años y, por cierto, se ponen de moda cada verano coincidiendo con esa obsesión por lucir unas piernas más bronceadas y -aparentemente, por el efecto visual- más delgadas. “El maquillaje corporal no es un concepto nuevo. Dermablend, por ejemplo, lleva años vendiéndose en farmacias. Tan solo es una tendencia que suele triunfar durante los meses de verano”, asegura el Dr. Colbert -dermatólogo y creador de Colbert MD– a S Moda.
Fue, de hecho, el año pasado preparándose para la llegada de estas fechas, cuando la mismísima Beyoncé aplicó maquillaje corporal en las piernas antes de su ya emblemática actuación en Coachella. Tras este gesto estaba su maquillador Sir John, que también hace lo propio con otras celebrities como Céline Dion, Ashley Graham o Joan Smalls, y que poco después se convertía en embajador del spray que él mismo catapultó a la fama: Colour Shield de Alleven.
Pero tampoco Queen B fue la primera: antes que ella supimos que lo utilizaban Sienna Miller, la mismísima Reina Letizia o Rihanna, que consiguieron poner de moda términos tan reveladores como el “efecto Photoshop” y productos tan icónicos como el celebérrimo Medias Invisibles, que ya tiene incluso su versión low-cost (por cierto, la más vendida en Amazon).
Sin embargo, la pregunta ante el nuevo fenómeno Kardashian es obligada: ¿Será este tipo de cobertura saludable para el cuerpo, especialmente si padeces alguna enfermedad de la piel? La respuesta del Dr. Timm Golueke, dermatólogo y creador de la firma cosmética Royal Fern, es concisa: «No pasa nada por cubrir con maquillaje adecuado lesiones y marcas corporales durante unas horas o un evento especial, pero no se debe hacer durante mucho tiempo ni a diario. Este tipo de lesiones se curan mucho mejor con el uso regular de una crema hidratante y aire fresco», confirma a S Moda. “La evitaría en climas húmedos o lluviosos y, en caso de necesidades especiales en la piel, probaría primero una muestra para comprobar que no produce irritaciones”, añade el Dr. Colbert, “pero la tendencia es inofensiva: si el producto está bien formulado puede hidratar y proteger además de cubrir imperfecciones”.
Lo malo es que nada es tan sencillo como parece: hay un factor más a tener en cuenta a la hora de maquillar la piel que nos explica Joy Isaacs, fundadora y CEO de Argentum. “Existe cierta preocupación debido a que para conseguir una alta cobertura tiene que haber un alto porcentaje de pigmento. El pigmento más comúnmente utilizado es el óxido de titanio -un pigmento blanco que es un excipiente neutro que necesitaría tintes de coloración adicionales, como el óxido de hierro, para igualar la presentación con el color de la piel humana-. Estos óxidos de hierro contienen trazas de níquel que pueden causar o agravar el eccema, junto con BHT (Hidroxitolueno Butilado) y perfumes que son alérgenos”.
¿Habrá pensado en todo esto, también, Kim Kardashian?
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