Casado entra en el cuerpo a cuerpo con Rivera a la caza de indecisos

"A tope”, respondió Pablo Casado cuando le preguntaron cómo estaba al llegar al plató de Atresmedia para el segundo debate a cuatro en 24 horas. El líder del PP había leído las críticas de la primera parte del partido, al que quiso presentarse con un tono nuevo, mucho más moderado de lo que acostumbra, para tratar de atraer al votante que duda entre ellos y Ciudadanos. En las filas populares se generó un dilema: ¿se habían excedido en el estilo “sereno y presidencial” que pretendían trasladar el día anterior? ¿Había que entrar en el cuerpo a cuerpo con el socio potencial? Las declaraciones de este martes por la mañana del secretario general del PP, Teodoro García Egea, sparring de Casado en el plató de Atresmedia por la noche, dejaron alguna pista: “Rivera le ha hecho el juego sucio a Sánchez”, dijo. Y Casado llegó al segundo debate “a tope”, dispuesto a replicar al líder de Ciudadanos. “Ayer [por el lunes] moderación y propuestas. Hoy [por este martes], liderazgo”, anticipaba un miembro de la cúpula del PP.

“Ustedes no han gobernado nunca”, le dijo Casado a Rivera varias veces, recordándoselo también a los espectadores. Quería vender la experiencia de gestión económica del PP, pese a que ha apartado de las listas electorales a los ministros del ramo con el Gobierno de Rajoy. Si el lunes, en TVE, Casado solo interpeló a Rivera una vez —para decirle que sus respectivos votantes no entenderían los ataques que estaba recibiendo por su parte—, este martes lo citó en siete ocasiones. Repartió sus ataques entre Sánchez y el líder de Ciudadanos, aunque en diferente tono. Los reproches al segundo solían empezar con un condescendiente “hombre, señor Rivera...”. Y los de Sánchez, con descalificativos: “El más mentiroso...” El socialista subrayó el enfrentamiento entre los dos, cada uno en un extremo, separados por el atril del PSOE y de Unidas Podemos. “Son las primarias de la derecha”, se burló. Rivera y Casado, en cualquier caso, se enfrentaron sobre todo en la primera mitad del debate. Después de un descanso, ambos dirigieron su munición hacia Sánchez y el candidato de Ciudadanos incluso defendió a Casado cuando el presidente mostró la fotografía de una votación del PP con Bildu. "Es un trilero", dijo. Las encuestas muestran, en todo caso, que su mejor oportunidad para gobernar pasa por un pacto entre ambos.

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Casado presentó a Sánchez como la "matrioska" que llevaba dentro a "independentistas, proetarras y comunistas" y en un momento del debate preguntó al líder socialista si indultaría a La Manada, mezclando el caso de violación con su permanente acusación al presidente del Gobierno: la de que indultará a los independentistas procesados.

En el llamado minuto de oro, el líder popular se atribuyó "la derrota de ETA" y pidió el voto "para defender sin complejos la unidad nacional". Si el voto de la derecha se divide, advirtió, una vez más, "ganarán los separatistas". Al término del debate, Casado recordó que llevaba nueve meses al frente del PP, frente a la "vieja política", en la que incluyó a Rivera: "Lleva 13 años dirigiendo su partido. Estas son sus cuartas elecciones".

Un exdirigente del PP del sector crítico vio a Casado mejor que en el asalto del lunes: “Al menos contesta a Rivera”, aunque lamenta que el mejor parado es Vox. "Si estuvieran presentes, se verían sus debilidades. Así se protegen, además, se les cita en el debate y pueden llevarse votos de gente que diga que no le gusta ninguno de los cuatro candidatos que está viendo", añade.