Así se derrumbó El Chicle
José Enrique Abuín se 'derrotó' tras dejarle su mujer sin coartada
La suerte de José Enrique Abuín Gey, alias El Chicle, se empezó a torcer el sábado por la tarde. Fue cuando su mujer se vino abajo y tumbó la coartada de su pareja. Hasta ese momento, Rosario Rodríguez había mantenido ante los agentes que la interrogaban la misma versión que dio al comienzo de las pesquisas, cuando declaró como testigo precisamente sobre los pasos que dio aquel 22 de agosto su pareja, ya entonces en la lista de sospechosos de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil en el caso de la desaparición de Diana Quer. Entonces, la mujer aseguró que habían estado aquella noche juntos y que, de hecho, le había acompañado a robar gasóleo dadas las penurias económicas por las que la pareja, que tiene una hija de ocho años, estaba pasando.
Los agentes hicieron ver a Rosario Rodríguez que, si mantenía dicha versión, ella sería acusada también de la desaparición de la joven, ya que le dejaron claro que tenían pruebas ya contra El Chicle: la localización del móvil que utilizaba él (aunque no estaba a su nombre) y el testimonio de, al menos, un testigo que aseguraba que había visto un vehículo de la marca Alfa Romero similar al que ambos usaban en los alrededores del lugar donde fue vista por última vez la joven.
Fue entonces, cuando Rosario admitió por primera vez que no estuvo con su compañero aquella noche y detalló que él se marchó de casa por la noche con el automóvil, con la excusa de que iba a ver un partido de fútbol en la televisión y que volvió muy tarde a la vivienda que compartían.
Con esta confirmación, los agentes retomaron el interrogatorio del Abuín informándole de que su pareja le había dejado sin coartada. El Chicle no tardó en confesar entonces su implicación en la muerte de Diana Quer. Se derrotó, como dicen los investigadores policiales en su argot, ya durante la madrugada.
Sin embargo, en un primer momento quiso hacer creer que todo había sido un accidente, que aquella noche de agosto él circulaba con su vehículo y atropelló accidentalmente a Diana Quer. Detalló que se asustó y que entonces cargó el cuerpo en el coche y lo llevó a la costa para lanzarlo al mar y deshacerse de él.
Los investigadores no creyeron su versión y le hicieron ver las numerosas contradicciones de su testimonio hasta que, finalmente, relató que vio a la joven caminar sola - las fuentes no han contado aún en qué zona- y se acercó a ella con el coche dispuesto a asaltarla.
Ya en plena confesión, detalló que introdujo a Diana Quer en el coche a la fuerza para violarla, pero, ante la fuerte resistencia de ella, incluso cuando ya estaba maniatada, la estranguló, supuestamente con sus propias manos. Luego, El Chicle decidió acudir a la nave industrial abandonada en Rianxo (A Coruña), donde arrojó el cuerpo desnudo a un pozo sito en el interior de la fábrica. Para que no se viera el cuerpo a simple vista desde el brocal, lanzó una plancha metálica al interior con la que el cadáver quedó cubierto. Entonces, cuando ya había confesado todos estos detalles, condujo a los investigadores hasta la sepultura de la joven Diana.
Hasta el momento, Abuín ha negado una y otra vez que llegara a abusar sexualmente de la joven. El análisis forense del cuerpo, que se iniciará en las próximas horas, revelará qué hay de verdad y de mentira en esta segunda y, hasta ahora, última versión.
A pesar del tiempo transcurrido desde la muerte, el cadáver de la chica se encontraba en bastante buen estado, según revelan los investigadores, lo que en un primer momento ha permitido confirmar visualmente que se trata de Diana sin género de dudas en la inspección ocular. No obstante, se le someterá a pruebas de ADN para certificar que se trata de ella. El estudio forense debe revelar también las verdaderas circunstancias y causas de la muerte.
José Enrique Abuín Gey, conocido como Quique el Chicle, pasará a disposición judicial este lunes en el juzgado número 1 de Ribeira (A Coruña), que dirige la investigación de la desaparición en agosto de 2016 de la joven madrileña Diana Quer.
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