Podemos busca con la moción de censura desgastar al PSOE

La moción de censura de Unidos Podemos al PP ha impactado de lleno en la campaña de las primarias socialistas, toda vez que el partido de Pablo Iglesias ha situado en la recta final de la misma los dos principales hitos de la moción, junto al debate parlamentario: la presentación de la iniciativa, a 48 horas de que los militantes del PSOE acudieran a las urnas, y la movilización social, con la búsqueda de una demostración de apoyo ciudadano con una concentración en la icónica Puerta del Sol del 15-M la misma víspera de la elección del líder del PSOE.Podemos ha negado toda intención de injerencia en el proceso interno de los socialistas, aunque los tiempos y su discurso sí han revelado que su estrategia ha mirado al partido al que quiere disputar la hegemonía de la izquierda.

A pesar de que los tres candidatos socialistas se han mostrado tajantes en el rechazo a la moción de Iglesias, la iniciativa les ha obligado a explicar sus planes de exigencia de responsabilidades al PP y ha tensionado el debate interno. En su discurso ayer ante la dirección del partido, Iglesias reveló su estrategia de impactar en sus adversarios. El líder de Podemos describió un pulso entre dos campos políticos en España, uno de “cambio” y otro de “restauración”. “Creo que podemos ensanchar ese campo político, podemos crear contradicciones en otros actores políticos que finalmente tengan que ceder y asumir que nuestro campo político es el campo político del futuro”, subrayó en clara referencia al PSOE.

El partido sostiene, en todo caso, que no ha modulado los tiempos de su propuesta de moción de censura en función del calendario de las primarias socialistas. “Nosotros no hemos decidido el calendario de escándalos que están poniendo en cuestión el prestigio de la democracia”, justifica el líder de Podemos. La decisión de presentar la iniciativa se precipitó la última semana de abril por las informaciones que apuntaban a la presunta actuación irregular del fiscal jefe de Anticorrupción, Manuel Moix, explican en la dirección del grupo parlamentario, pero desde que el 28 de abril fue anunciada el partido controló los tiempos y no supo justificar, por ejemplo, que el registro se retrasara al final de la semana. Desde el pasado lunes nada le impedía presentarla, una vez las bases dieron el sí en una consulta, pero el partido la pospuso a pesar de que en público sostenía que la presentación era urgente.

Discurso endurecido

Podemos ha endurecido progresivamente el discurso contra el PSOE, al que no ha dejado de interpelar para que se sume a su moción. La portavoz parlamentaria, Irene Montero, sentenció en la presentación de la iniciativa que la pregunta sobre la mesa era qué formaciones políticas iban a “sostener” de nuevo al PP en el poder, mientras Iglesias acusó a los socialistas de estar “más cerca del PP que de Unidos Podemos”. Ayer, el secretario de Organización, Pablo Echenique, incidió en que “muchísimos votantes y militantes del PSOE apoyan la moción de censura aunque no la apoye la gestora de Javier Fernández y los tres candidatos”.

En el mitin en Sol, Iglesias no citó al PSOE, pero sí dejó veladas referencias a los socialistas, al aludir al “PP y sus aliados”, que “no tienen más proyecto que el miedo”. En un discurso con tinte electoral, Iglesias afirmó que Podemos no “traiciona” a su gente.