El constructor arrepentido de Gürtel se niega a colaborar en el caso de los papeles de Bárcenas

Alfonso García Pozuelo, el antiguo propietario de Constructora Hipánica, una de las sociedades que figuraban como donante en los papeles de Bárcenas, se ha negado a declarar este jueves ante el titular del Juzgado Central de Instrucción número 5, José de la Mata, tras la reciente reapertura de la causa por las declaraciones efectuadas por el mismo y Francisco Correa en el juicio por la primera etapa del caso Gürtel. El empresario rechazó contestar pese a que el magistrado le recordó que había llegado a un acuerdo con la Fiscalía Anticorrupción para colaborar con la Justicia a cambio de una rebaja en la petición de pena. García Pozuelo se mantuvo en el ‘no’ y se dio por terminada su comparecencia como imputado. A las doce está previsto que declare también como investigado Francisco Correa, el cabecilla de la red de corrupción quien con sus revelaciones durante el juicio dio pie a que se reactivara el caso sobre la contabilidad opaca del PP.

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El constructor ya tuvo que comparecer como imputado por los ‘papeles de Bárcenas’ en mayo de 2013. Entonces, también se negó a declarar. Lo hizo porque su nombre figuraba relacionado con nueve entregas de dinero al PP entre diciembre de 1998 y abril de 2006 por un total de 258.161 euros. Una cantidad que se repartieron de modo irregular durante todo este tiempo y que fluctuó entre los 2 millones de pesetas (12.020 euros) que aparecen supuestamente entregados en julio de 2000, y los 60.000 euros que 'donó' a la formación política el 4 de diciembre de 2013.

Este último pago fue objeto de especial análisis en un informe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía incorporado entonces a la causa, ya que se relacionaba con una entrega de idéntica cantidad por parte de la trama corrupta de Francisco Correa al constructor. Ocho días antes el propio García Pozuelo había entregado supuestamente 600.000 euros a la red Gürtel como 'recompensa' por la concesión de un contrato a su empresa que la Policía no pudo determinar entonces.

Sin embargo, la actitud de García Pozuelo cambió poco antes de iniciarse el juicio por la primera etapa de la trama de Correa y decidió confesar tras llegar al acuerdo con la Fiscalía que ahora le ha recordado el juez De la Mata. El antiguo dueño de las Construcciones Hispánica ya admitió en su escrito de defensa pagos en negro a Francisco Correa a cambio de recibir adjudicaciones en Castilla y León. Una actitud que mantuvo cuando se produjo su declaración ante el tribunal. Ese día aseguró que esa mordida iba “para organismos centrales”, que no llegó a especificar.

Anticorrupción pide para él una pena de cuatro años y seis meses por cohecho continuado. En otra pieza del caso Gürtel, la referida a los años 2003 a 2007, todavía pendiente de juicio, García Pozuelo también ha reconocido que pagó 1,33 millones de euros a cambio de ser el adjudicatario de diversas obras en Boadilla del Monte (Madrid).

Otra autorización de Suiza

Por otra parte, el tribunal del caso Gürtel ha recibido de las autoridades de Suiza una nueva autorización para que la Justicia española utilice para acusar de delitos fiscales los datos bancarios remitidos en su día sobre las cuentas que tenían en el país helvético diferentes implicados en la trama. En concreto, Berna lo permite ahora sobre los depósitos que la investigación relaciona con Pablo Crespo, presunto lugarteniente de Correa. El escrito de Suiza detalla que son las cuentas que figuraban a nombre de las sociedades Hopler Advisors, Barker Finance Inc y Mall Business SA en el Credit Suisse; la de Clearville Gorup SA en el Banque Mirabaud, y Midcourt Ltd en el CIC Bank. La decisión, fechada el pasado 9 de febrero, pero que ha sido comunicada a la Fiscalía Anticorrupción el pasado martes, se une a la que ya se recibió para las cuentas helvéticas de otros encausados, entre ellos Luis Bárcenas.