Carmena vuelve a marcar distancias con Pablo Iglesias, de quien dice que no es su “socio”

Manuela Carmena ha vuelto a marcar distancias con Pablo Iglesias y Podemos en un acto celebrado este martes en Madrid. "Iglesias es un buen amigo, le estimo, pero no somos socios" ha explicado la alcaldesa, para luego aclarar que, en su opinión, el líder de Podemos es un "gran político" y una persona con la que ha conversado alguna vez por teléfono, pero con quien no suele tener encuentros habituales. Preguntada sobre Rita Maestre e Íñigo Errejón, también presentes en el acto, Carmena ha defendido su "inteligencia" y "bondad".

Carmena dice no estar "en sociedad con nadie". La alcaldesa de Madrid ha vuelto a revindicar su independencia ante Podemos y todas las formaciones políticas. Con respecto a Pablo Iglesias, artífice de la candidatura de Carmena a la alcaldía de Madrid de 2015, la alcaldesa de la capital ha explicado que ha hablado "varias veces con él, pero lo que se dice amistad, de salir y de contarte cosas, no".

La dirección de Podemos ha evitado contestar a las palabras de la alcaldesa, por la que ha mostrado "respeto" y "respaldo" a su labor al frente del Ayuntamiento, según ha expresado la portavoz parlamentaria, Irene Montero, en rueda de prensa en el Congreso tras la Junta de Portavoces.

La relación entre la regidora y el líder de Podemos ha sido siempre, en todo caso, distante. Carmena ha evitado desde el comienzo de su mandato su identificación con Podemos, a pesar de que el partido pone como ejemplo de su buena acción de Gobierno al Ayuntamiento de Madrid. La alcaldesa rechazó, por ejemplo, participar en la campaña de las pasadas elecciones generales en apoyo de Podemos, a diferencia de lo que sí hizo la regidora de Barcelona, Ada Colau. Carmena criticó también, por ejemplo, la "imagen de poca flexibilidad" de la izquierda el 20-D en las negociaciones de Gobierno, a lo que Iglesias le contestó que ella misma era un ejemplo de la flexibilidad de Podemos, que la aupó a la alcaldía a pesar de no formar parte de su partido.

Con sus palabras de hoy, la regidora ha buscado aún así evitar el conflicto y mantener su equidistancia en un momento delicado para los equilibrios del gobierno municipal. Su Ejecutivo empezó a mostrar algunas grietas tras la destitución de la concejal de Cultura, Celia Mayer, la semana pasada. El núcleo duro de Carmena, formado por pocos concejales y funcionarios, no siempre coincide con los ediles más jóvenes, que o bien provienen de las filas de Podemos o de otras siglas vecinales aglutinadas en Ganemos.

Este es el caso del ala más radical del Gobierno local, cercana al colectivo okupa del Patio Maravillas y de Izquierda Unida, pero también de algunos miembros de Podemos, como la misma portavoz municipal, Rita Maestre, de quien, sin embargo, Carmena ha elogiado la actitud e "inteligencia". La exjuez ha hecho también un guiño a la posible candidatura de Íñigo Errejón, ex número dos de Podemos, a la Comunidad de Madrid, calificándole de "buenísimo candidato". Pero ha recordado que son las primarias las que deben establecer el jefe de las listas electorales.

Lo cierto es que Carmena sigue sin querer volver a presentarse como candidata en 2019, cuando acabe su mandato. "No me voy a volver a presentar, eso está claro", ha afirmado. Para Ahora Madrid, una confluencia de fuerzas heterogéneas que ha llegado al Gobierno de la ciudad gracias al protagonismo y la visibilidad de Carmena, una segunda candidatura de la exjuez constituiría un claro elemento de fortaleza. Para las fuerzas de la oposición, en cambio, esto representaría un problema, dado el carácter personalista que se le otorga a cada elección municipal.