¿Es Molina de Segura una de las ciudades europeas donde se consume más cocaína?
Un estudio del Observatorio Europeo de Drogas sitúa a la localidad murciana por encima de París, Bruselas o Milán
¿Es Molina de Segura una de las ciudades europeas donde se esnifa más cocaína? Esa podría ser una conclusión apresurada del sexto informe anual del Observatorio Europeo de Drogas, que ubica a la localidad murciana, de casi 70.000 habitantes, en el quinto lugar del listado y cifra el consumo de dicha sustancia en 563 miligramos (entre seis y ocho rayas) por 1.000 personas al día. Un promedio es superior al de grandes urbes como Bruselas (416,8 miligramos), Milán (306,6), o París (169,6).
Sin embargo, ese titular, sin duda llamativo, debe ser matizado con algunas cautelas. En primer lugar, el estudio analizó solo los datos de 44 localidades de 18 países de la Unión Europea y Noruega, entre ellas cinco españolas: Barcelona (la segunda ciudad europea donde se consume teóricamente más cocaína según el informe, con 699 miligramos por cada 1.000 personas al día), Castellón, Santiago, Valencia y la citada Molina de Segura.
En segundo lugar, existen limitaciones en el método para identificar los los metabolitos, que son las sustancias producidas cuando el cuerpo metaboliza las drogas. El análisis cuenta con dificultades que "plantean incertidumbres asociadas a la obtención de muestras de aguas residuales, el comportamiento de los biomarcadores seleccionados en la red de alcantarillado, la fiabilidad de las mediciones analíticas realizadas en diferentes laboratorios, los diferentes métodos de cálculo retrospectivo y los diferentes enfoques utilizados para estimar el tamaño de la población analizada", según reconoce el propio estudio.
En Molina de Segura se desarticuló el pasado mes de octubre una banda que distribuía droga a la región de Murcia y a toda la Comunidad Valenciana. Teniendo en cuenta que la toma de muestras para el estudio se realizó el pasado mes de marzo y que en el informe de 2015 el consumo de cocaína en dicha localidad fue menos de la mitad (240 miligramos) que en 2016, no es descartable que en el proceso de tratado y adulteración parte de la droga manipulada por dicha banda acabara de alguna forma en las aguas residuales de la localidad, distorsionando el estudio.
La operación de la Policía Nacional se había lanzado el febrero y concluyó con la detención por los Grupos de Estupefacientes de cuatro integrantes del laboratorio.
Amberes, en cabeza
El informe del Observatorio Europeo de Drogas sitúa a Amberes, Bélgica, en primer lugar, con 914 mg por 1.000 habitantes, seguido por Londres (894), Zúrich (722), Barcelona (699) y Molina de Segura. “Tomamos una muestra antes de que las depuradoras las limpien cada 24 horas durante una semana que no esté influida por otros factores, como las Fallas”, explica Lubertus Bijlsma, investigador del Instituto Universitario de Plaguicidas y Agua, que ha tomado las muestras de Castellón. Una vez que extraen los residuos del fármaco objetivo, en este caso de la cocaína, lo calculan en función del flujo de agua que ha entrado en ese periodo de tiempo y lo dividen por los habitantes de la localidad. “Nos encantaría que se sumara Madrid”, afirma Bijlsma, quien explica que el permiso lo tiene que dar la propietaria de las depuradoras, que muchas veces están a cargo del Ayuntamiento.
No es la primera vez que un estudio de este tipo genera polémica. En 2007 un informe hecho con un procedimiento similar concluyó que la localidad burgalesa de Miranda de Ebro era la segunda del mundo donde se consumía más cocaína. Entre la indignación de los vecinos, el alcalde aseguró entonces que la ciudad, de unos 40.000 habitantes, se había dotado de una depuradora y que la única explicación era que la sustancia procediera de la planta química que existe río arriba.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.