Fernando Jiménez Latorre reemplaza a Soria como representante de España en el Banco Mundial
El Gobierno tenía de plazo hasta esta medianoche para presentar un candidato alternativo
Fernando Jiménez Latorre ha sido el elegido para ocupar el cargo de director ejecutivo del Banco Mundial previsto para José Manuel Soria como solución de urgencia a punto ya de cerrarse el plazo para presentar la candidatura y que Economía comunicó a través de la agencia EFE. Según fuentes gubernativas, Jiménez Latorre, que presentó su candidatura tanto al FMI como al Banco Mundial, era el que mejor currículum presentaba después de Soria. Se da la circunstancia de que la semana pasada la misma Comisión de Evaluación que le ha designado le había propuesto para director alterno del Fondo Monetario Internacional (FMI), organismo del que había sido los dos años anteriores director ejecutivo dentro de la silla que España comparte con Colombia, Costa Rica, Salvador, Guatemala, Honduras, México y Venezuela (la dirección general es rotatoria entre España, Venezuela y México y se cambia cada dos años). El mandato es por dos años y comienza en noviembre de 2016.
La marcha de Jiménez Latorre obliga ahora a cubrir el hueco correspondiente a España que deja en el FMI. El Gobierno tendrá que designar a otra persona, para lo que tiene un plazo mayor que expira en unas semanas. También se da la circunstancia de que la dirección alterna de España en el Banco Mundial la ha ocupado Beatriz de Guindos, sobrina del ministro de Economía.
Jiménez Latorre, técnico comercial y economista del Estado nacido en Madrid en 1957, ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional en la Administración Pública, primero con la Administración socialista y luego con la del PP en diversos cargos relacionados con las relaciones con la política comercial, las relaciones con los países de la OCDE y la UE y con la competencia.
Desde la llegada de Luis de Guindos a Economía en 2011 y hasta su marcha al FMI en 2014 fue secretario de Estado de Economía y Apoyo a la Empresa. De perfil bajo y verbo monocorde, bajo esa responsabilidad le tocó, como tarea más peliaguda y polémica, gestionar la crisis financiera y coordinar la reestructuración de la banca junto con el Banco de España, con el que el departamento ministerial chocó en diversas ocasiones por no mantener las mismas estrategias.
Latorre, junto al subgobernador del Banco de España, Fernando Restoy, tuvo que negociar precisamente con el FMI y la Comisión Europea las ayudas para la citada reconversión en la que el problema más destacado fue Bankia. El rescate bancario español supuso la aportación de 42.000 millones y la creación de un banco malo impuesto por Bruselas.
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