Iglesias propone regular por ley la asistencia del presidente a debates

El candidato de Podemos a La Moncloa, Pablo Iglesias, centró el martes su balance del debate de EL PAÍS en las críticas al aspirante ausente: el presidente del Gobierno y líder del PP, Mariano Rajoy. Toda la dirección de la formación emergente acusó al jefe del Ejecutivo por no confrontar sus propuestas con las del líder del PSOE, Pedro Sánchez, el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, y el propio Iglesias. Pero fue este último, durante la presentación de su libro Una nueva Transición,quien lanzó una propuesta.

“Cuando nosotros gobernemos deberemos obligar a que participar en debates sea algo que no pueda eludir alguien que quiere ser presidente del Gobierno. Dar la cara ante los medios de comunicación y participar en debates debería ser una obligación”. Iglesias evitó hacer una valoración sobre el ganador —“no es elegante”, dijo— y señaló que “el hecho de que se produzcan debates es ya en sí mismo una victoria de la ciudadanía, sobre todo debates nuevos, en los que no hay reglas, en los que no hay pactos, en los que la gente pueda escuchar las opiniones que se puedan expresar en libertad”.

Los dirigentes de Podemos atacaron ayer al “perdedor” de ese encuentro más que opinar sobre el ganador. Esa crítica tiene un objetivo: demostrar que la ausencia del presidente del Gobierno refleja temor a la confrontación y falta de proyecto político.

El jefe de campaña del partido, Íñigo Errejón, preparó el debate con Iglesias y se mostró satisfecho tras su celebración. “Pablo Iglesias ha presentado las razones de un nuevo país que no deje a nadie atrás”, consideró antes de dejar claro que, en su opinión, “el debate lo ha perdido un presidente que se esconde, y lo ha ganado la gente, que ha podido contrastar entre diferentes proyectos”. En la misma línea se pronunciaron los líderes en Andalucía y Aragón, Teresa Rodríguez y Pablo Echenique.

En el argumentario de campaña de Podemos figura además la idea de que un país que ya ha cambiado en las calles, puede llevar ese cambio a las instituciones. Así, según Errejón, “el debate mostró claramente que España ya ha cambiado, y toca ratificarlo ahora en las urnas”.