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No en el nombre de Alá

Las comunidades musulmanas de España dedican el sermón del viernes a condenar los atentados de París

Ana Carbajosa
Varias personas rezan en Centro Cultural Islámico de Madrid el viernes.
Varias personas rezan en Centro Cultural Islámico de Madrid el viernes.ÁLVARO GARCÍA

Este viernes de oración ha sido diferente del resto para los musulmanes en España. Ha sido el primero tras los atentados perpetrados por terroristas islamistas en París en nombre de su religión y el elegido por las mezquitas para desmarcarse sin ambages del mal llamado Estado Islámico y emitir una condena coordinada. Las miradas estaban puestas sobre todo en la gran mezquita de Madrid, junto a la carretera de circunvalación M-30. En parte por ser la gran mezquita de la capital y en parte por tratarse de un templo saudí y poco dado a las explicaciones públicas. Este viernes ha decidido, sin embargo, abrir la puerta durante la oración y un portavoz del centro ha atendido después a los periodistas.

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Unos 1.500 fieles escucharon atentos la hutba, el sermón del joven imán Hussan Khoja. "Son grupos injustos y corruptos. Derraman la sangre, tergiversan los textos del Corán", interpretó en el flamante edificio que alberga el centro cultural islámico. "Se autoproclamaron califas y tomaron por lema el derramamiento de sangre tanto para musulmanes como para los que no son musulmanes", continuó en un texto fruto de tres días de trabajo y de una decisión meditada de la dirección del centro.

"Debéis respetar el país en el que vivís, respetar sus leyes y su gente y que seáis una buena imagen del Islam [...]. Estos países te abrieron mezquitas y te dieron libertad religiosa e intelectual. Son bondades que no existen en algunos países musulmanes", indicó en un texto con inusual autocrítica. Pidió también a los fieles que no hablen con extraños por Internet o WhatsApp.

Terminada la oración y mientras la riada de hombres y mujeres de toda condición abandonaba el centro, Khoja charló brevemente con este diario sobre el creciente peso de las redes sociales como referencia teológica para muchos jóvenes frente a las mezquitas: "El problema es que los jóvenes quieren hacer las cosas a su manera, no les gusta que les digamos lo que tiene que hacer", dijo. Khoja indicó que el problema es que hay gente "con el pensamiento cerrado" que no acude a los imanes porque creen poseer su propia verdad. Preguntado por la posibilidad de que haya en España jóvenes dispuestos a atentar como en Francia, el imán, con barba y un tocado en la cabeza, respondió: "Todos tenemos miedo".

Horas antes, en el madrileño barrio de Vallecas, otro imán, Houssein el Ouarachi, explicaba que hasta ahora cundían en algunas mezquitas "reticencias del tipo: por qué tengo que condenar ahora si no condeno cuando matan a musulmanes en Irak. Pero ahora ya se ha dado ese paso". El Ouarachi cree que los musulmanes son doblemente víctimas porque por un lado matan a sus compatriotas y por otro les culpan directa o indirectamente de las masacres perpetradas en su nombre. Además, explica que la mayor parte de las víctimas de Al Qaeda y el Isis son musulmanes al tiempo que los que combaten a estos grupos terroristas profesan también en su mayoría el islam. Pero sobre todo advierte contra "la tendencia de algunos musulmanes a caer en el victimismo". El presidente de la comunidad musulmana de Vallecas cree que culpar a Occidente de todos los males, además de ser inútil, conduce al inmovilismo y elimina la responsabilidad de los Gobiernos y las poblaciones musulmanas. "Es injusto".

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Sobre la firma

Ana Carbajosa
Periodista especializada en información internacional, fue corresponsal en Berlín, Jerusalén y Bruselas. Es autora de varios libros, el último sobre el Reino Unido post Brexit, ‘Una isla a la deriva’ (2023). Ahora dirige la sección de desarrollo de EL PAÍS, Planeta Futuro.

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