Podemos aparca una reordenación de la deuda como la de Grecia

Podemos creee que la prioridad de España no es una reordenación de la deuda pública como la de Grecia. “El proceso de reestructuración de la deuda que plantea Syriza no creemos que en este momento sea el que necesita España”, ha afirmado este martes el secretario de Economía de Podemos, Nacho Álvarez, al valorar los efectos del acuerdo entre el Eurogrupo y el Gobierno de Alexis Tsipras. Este partido, que defendía hasta hace unos meses la necesidad de una reestructuración de la deuda pública, ha fijado como prioridad desde las pasadas elecciones municipales y autonómicas la deuda privada, en concreto, la de las familias con deuda hipotecaria.

La dirección de Podemos, formación que se ve como un espejo de Syriza en España, rechaza con rotundidad el acuerdo entre el Eurogrupo y Grecia pero busca ahondar en las diferencias entre los dos países y las dos economías. “No me gusta nada”, ha declarado Pablo Iglesias a EL PAÍS en referencia al acuerdo. “Estoy seguro de que tampoco le gusta a Alexis Tsipras, ni a Syriza”, ha añadido. Con todo, el líder del partido emergente cree que “los halcones han perdido algunas plumas en el camino”. “Una cosa es cierta, los halcones de Merkel y la Troika no han logrado del todo sus objetivos”, considera.

“Qué objetivos eran? Tumbar al Gobierno de Grecia para que Schaüble [ministro de Finanzas alemán] pudiera obtener como trofeo la cabeza de Tsipras. Eso no ha sucedido. El Gobierno de Merkel, con tal de ejercer su poder sobre Europa, ha demostrado ser capaz de poner en peligro el proyecto europeo”, mantiene Iglesias. La dirección de Podemos hizo hace una semana un llamamiento a los partidos socialdemócratas europeos, incluido el PSOE, para que se acercaran al Gobierno griego y le ayudaran en la negociación. “Si algo me entristece especialmente”, asegura ahora el politólogo, “ha sido comprobar, una vez más, que los socialdemócratas europeos, con los alemanes a la cabeza, han claudicado por completo ante el gobierno autoritario de las finanzas sobre los pueblos”.

Al describir este escenario, Iglesias recurre a la Primera Guerra Mundial. “Me recuerda a una escena horrible de 1914 firmando los créditos de guerra”. “Lo dicho”, prosigue, “el acuerdo no gusta, no creo que la humillación le guste a ningún demócrata, pero una cosa queda clara: los halcones han perdido algunas plumas por el camino y hoy están un poco más a la defensiva que ayer. Tenemos una encrucijada histórica delante nuestro en Europa. Democracia o barbarie. Nosotros apostamos por la primera”.

Los miembros de Podemos cargaron desde el domingo por la noche contra el acuerdo alcanzado entre el Eurogrupo y el Ejecutivo griego. Algunos de ellos, como el exdirigente Juan Carlos Monedero, llegaron a calificarlo de “acto de terrorismo”, sin reconocer ningún tipo de error en la gestión de la crisis por parte de Alexis Tsipras. “Todo nuestro apoyo al pueblo griego y a su Gobierno frente a los mafiosos”, mantuvo Iglesias en su cuenta de Twitter.

El secretario general lanzó sábado lanzó ante sus simpatizantes una clara declaración de intenciones: “Espera, Alexis, que ya llegamos, espera que ya llegamos y vamos a ser más fuertes”. Este es el argumento que defiende Podemos, que achaca la dureza del acuerdo a la soledad del Gobierno griego en Europa. Juan Carlos Monedero afirmó que el acuerdo le “avergüenza”, y cargó este lunes contra el popular Javier Maroto, acusándole de hablar como “un capataz de una plantación justificando los latigazos”.