Margallo equipara las estrategias de España y Brasil sobre Venezuela

España y Brasil tienen estrategias “muy parecidas” y “aproximaciones absolutamente idénticas” a la crisis venezolana. Así, al menos, lo ha asegurado el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo, tras reunirse este miércoles en el Palacio de Itamaraty con su homólogo brasileño, Mauro Vieira.

Hasta ahora, al contrario que Mariano Rajoy, Dilma Rousseff ha evitado criticar al régimen de Nicolás Maduro y se ha escudado en el principio de no injerencia para no recibir a Lilian Tintori y Mitzy Capriles, las esposas de los políticos encarcelados Lepoldo López y Antonio Ledezma, que visitaron Brasil en mayo. Esta aparente tibieza le ha valido a Rousseff duras críticas de su ex rival por la Presidencia Aécio Neves, que encabeza la visita a Caracas de una delegación de la oposición brasileña.

Sin embargo, Margallo ha subrayado que tanto España como Brasil tienen “intereses económicos muy importantes” en Venezuela, con la que el segundo comparte una extensa frontera, por lo que ambos países están muy interesados en garantizar la estabilidad de Caracas. Brasil, además, ha recordado Margallo, forma parte con Ecuador y Colombia de la troika nombrada por Unasur para mediar en la crisis venezolana tras los disturbios del año pasado.

La crisis venezolana es uno de los temas centrales de la gira americana que el canciller español inició el pasado lunes: la abordó en Haití con el presidente Michel Josep Martelly, que ha albergado las conversaciones entre una delegación venezolana y otra estadounidense; y con sus interlocutores brasileños, incluido el vicepresidente Michel Temer, que ya visitó Madrid en abril pasado.

Respecto a las relaciones bilaterales, Maduro no ha cumplido hasta ahora sus reiteradas amenazas de “revisión exhaustiva” y represalias. Superada la tensión que rodeó el viaje del expresidente Felipe González a Caracas para apoyar a los opositores presos, con el pleno respaldo político y material del Gobierno, Margallo ha decidido enviar la semana próxima a Venezuela a su secretario de Estado para Iberoamérica, Jesús Gracia, en un intento por recomponer puentes y normalizar relaciones. En los márgenes de la reciente cumbre entre la UE y la CELAC (Comunidad de Estados de Latinoamérica y el Cariba) en Bruselas Margallo ya se entrevistó con el vicepresidente venezolano Jorge Arreaza.