Parón judicial en la investigación sobre la tragedia de Tarajal

Una quincena de rosas en recuerdo de los 15 fallecidos. Y un trozo de concertina para protestar contra las fronteras “que matan”. Como la de Tarajal (Ceuta), dicen las ONG que han preparado actos de homenaje a los inmigrantes que murieron, hace justo un año, al intentar alcanzar a nado la costa de la ciudad autónoma. Amnistía Internacional (AI) y la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) colocarán hoy en Madrid, en el Templo de Debod, esas 15 flores y el trozo de alambrada para exigir una “efectiva” investigación de lo ocurrido aquel 6 de febrero de 2014. “No podemos dejar que estas muertes se olviden”, según Amnistía Internacional.

“Pedimos que se tome declaración a los responsables del operativo policial que se desplegó en la frontera durante la tragedia”, remacha Patricia Fernández, abogada de la Coordinadora de Barrios, uno de los colectivos personados en la causa. La investigación, tras 12 meses, apenas ha avanzado. Los supervivientes no han acudido a los tribunales a ofrecer su versión. Y el proceso está parado a la espera de saber si la Audiencia Nacional asume las pesquisas. La titular del Juzgado de Instrucción número 6 de Ceuta se inhibió el pasado 17 de diciembre al considerar que las muertes se produjeron en territorio marroquí.

Una tesis en la que ha insistido este jueves el titular del Interior, Jorge Fernández Díaz, que se enfrentó, de nuevo, a las preguntas por la actuación de la Guardia Civil aquel día. El ministro hizo hincapié en que las pelotas de goma lanzadas al mar por los agentes “no causaron” el fallecimiento de los subsaharianos. “No se ha acreditado que hubiera relación causa-efecto”, destacó. Aunque esa idea no la comparten las ONG. “Quedan pocas dudas de que, al menos, un parte sustantiva de la responsabilidad de aquellas muertes radica en la acción de la Guardia Civil aquel 6 de febrero”, apunta la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía. Este colectivo, que ha convocado para mañana una marcha de dos horas entre el CETI de la ciudad autónoma y Tarajal, concluye de inmediato: “Menos dudas quedan de los intentos del Gobierno español para ocultar y manipular lo ocurrido”.

Perdieron la vida durante una actuación del Estado español Patricia Fernández

En los días posteriores a la tragedia, el delegado del Gobierno y el director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, negaron que se hubiera utilizado material antidisturbios en el agua. Una versión que desmintieron después las imágenes de las cámaras de seguridad, lo que provocó la comparecencia urgente de Fernández Díaz en el Congreso. Aunque nadie asumió responsabilidades políticas. “Lo que está claro es que esas 15 personas perdieron la vida durante una actuación del Estado español y bajo la directa supervisión de las fuerzas de seguridad nacionales”, recalca Patricia Fernández.

La tragedia de Tarajal ha marcado desde entonces la política migratoria del Gobierno, que regularizó las devoluciones en caliente, pese a la oposición del Defensor del Pueblo, de las ONG, del Consejo de Europa y de la comunidad internacional. Todos consideran que estos retornos inmediatos violan el derecho de asilo.