Malestar en la policía por no acudir el ministro al funeral de un agente
Cientos de policías homenajean al compañero muerto al ser arrojado a la vía férrea
“Al ministro del Interior solo le interesa el Cuerpo Nacional de Policía cuando hace alguna operación que a él le puede servir para lucirse. Y está bien que el ministro venda los resultados de la policía. Pero también tiene que estar con nosotros cuando uno de los nuestros muere en acto de servicio”. Mónica Gracia Sánchez, secretaria general del Sindicato Unificado de Policía (SUP), pone así voz al descontento que hay en el cuerpo por la inasistencia del ministro del Interior, Jorge Fernández, al entierro del agente Francisco Javier Ortega del Real, fallecido el pasado viernes al ser presuntamente arrojado a las vías del tren en Madrid por un hombre sospechoso.
Varios cientos de policías se concentraron este lunes en silencio ante la Comisaría General de Seguridad Ciudadana, en Madrid, para recordar al agente Ortega. Actos similares se registraron en otras muchas comisarías de España, con participación de ciudadanos.
La concentración de Madrid había sido convocada inicialmente por el Sindicato Unificado de Policía (SUP), la Confederación Española de Policía (CEP) y el Sindicato Profesional de Policía (SPP), a los que se unieron la Unión Federal de Policía (UFP) y el Sindicato Independiente de Policía Española (SIPE).
Todos los representantes sindicales criticaron que el ministro no acudiera ni a los actos de despedida convocados tras la muerte de Ortega como a los organizados cuando falleció la policía Vanessa María Lage Carreira, muerta por disparos de un atracador en Vigo en noviembre pasado, ni del policía Francisco Enrique Díaz Jiménez, fallecido a puñaladas en mayo en Málaga.
Los sindicatos han suscrito un comunicado en el que denuncian: “La ausencia del ministro del Interior y de otros responsables politicos en actos de despedida a compañeros asesinados se está convirtiendo en una práctica habitual, además de irrespetuosa”. Y continúa el escrito sindical: “La presencia del ministro en la estación de Embajadores (Madrid), donde Francisco Javier Ortega fue asesinado, no es suficiente. Hay que estar dando la cara en el funeral. Esa actitud abre una brecha considerable entre la cúpula política del ministerio y los profesionales de la seguridad pública. Que la sociedad sepa que nos sentimos ofendidos por esa actitud fría y distante”.
A la concentración de Madrid asistió el diputado socialista Antonio Miguel Carmona, quien consideró que es “una absoluta vergüenza” la ausencia del ministro y del secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez.
El portavoz socialista de Interior en la Congreso, Antonio Trevín, solicita la presencia de Martínez en la Comisión de Interior al considerar que los efectivos del Cuerpo Nacional de Policía “no se sienten arropados” por el Ministerio del Interior “en circunstancias muy dolorosas para ellos”. “El ministro no ha estado presente [en los funerales] y tiene que explicarnos por qué”, se lamenta Trevín.
Los sindicatos policiales quieren, además, que las banderas de todas las dependencias oficiales ondeen a media asta, en señal de luto, cuando fallezca un policía en acto de servicio. Los sindicatos desean que la declaración de luto oficial, que compete actualmente al Consejo de Ministros, pueda ser adoptada por otros estamentos.
“Hemos enviado siete escritos al ministro... y ni siquiera se ha molestado en contestarnos”, protesta Mónica Gracia, la dirigente del SUP. “Al ministro le importa muy poco el Cuerpo Nacional de Policía”, agrega.
Por otra parte, la policía ha detenido en Alicante a un individuo por un delito contra el honor del agente fallecido el pasado viernes en Madrid. Lo ha sido tas publicar en su perfil de una red social “un negro empuja a un delincuente a la vía del tren…”, comentario en el que calificaba como delincuente al policía, según Interior. En la cuenta del arrestado figuran otras publicaciones en las que se refiere a otros agentes policiales de forma despectiva: “He conocido chimpancés vegetativos más inteligentes que cualquier madero de Denia”.
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