_
_
_
_
_

Podemos reduce su presencia en los medios en su semana más crítica

El partido inicia una operación para proteger al líder de la sobreexposición

F. M.
Íñigo Errejón, el pasado lunes en Madrid.
Íñigo Errejón, el pasado lunes en Madrid. ALEJANDRO RUESGA

Podemos ha iniciado en su semana más crítica hasta el momento una operación para proteger a Pablo Iglesias, elegido secretario general de la formación el pasado sábado, de la sobreexposición en los medios de comunicación. Esta circunstancia se ha producido después de algunas entrevistas en las que el líder del partido evitó contestar con concreción a una serie de preguntas sobre su programa electoral y pasados pronunciamientos de sus líderes.

Podemos trata ahora, después de su constitución como partido político, de elaborar un discurso viable, sobre todo unas propuestas económicas realizables. Mientras tanto, busca reducir la presencia mediática, en particular la televisiva, a la que los principales portavoces del partido han recurrido en los últimos meses. Lo hace comenzando a promover “nuevas voces” y otros cargos que integran el Consejo Ciudadano.

Tras una semana marcada por las críticas a Íñigo Errejón, responsable de la Secretaría Política de Podemos, y su contrato de investigación en la Universidad de Málaga, ayer se produjo una circunstancia insólita. Iglesias canceló una entrevista pactada con Telecinco y prevista para esta noche, porque así lo decidió por mayoría, según informó la cadena, la dirección de la formación que encabeza. Telecinco señala a través de un comunicado que Podemos propuso una alternativa que consistía en la sustitución de la entrevista por una conexión remota con una sola pregunta. Iglesias ha rebajado su agenda también en otros medios para centrarse en el partido, que ahora afronta el reto de su organización territorial, y en el programa electoral con el que pretende ocupar “la centralidad del tablero” con vistas a las próximas elecciones generales de 2015.

Otros cargos de la cúpula también han evitado esta semana tertulias en otras cadenas, aunque sí han participado en actos públicos y siguen pronunciándose en las redes sociales. También ha dado un paso atrás Errejón, número dos de Podemos, después de que se supiera que desde marzo tiene un contrato de 1.825 euros brutos (unos 1.600 netos) para una investigación en la Universidad de Málaga (UMA) sobre la vivienda en Andalucía. Aunque ese contrato establece 40 horas semanales presenciales en horario de 8.00 a 16.00, Errejón realizó ese trabajo desde Madrid previa autorización de su supervisor. Tras una entrevista en la cadena Ser el pasado miércoles, el investigador en Ciencias Políticas tampoco ha abundado en las explicaciones públicas de ese caso.

En cualquier caso, ayer Errejón sí atendió a la prensa antes de participar en un acto de Podemos en Fuenlabrada (Madrid) junto a Juan Carlos Monedero e Irene Montero. Mantuvo que no hay nada irregular y defendió la necesidad de controlar el uso del dinero público. En el mitin, proclamó: “Van a tener que fabricar toneladas de infamia y aun así no nos van a detener. Han puesto a mucha gente a investigar y han descubierto que vivimos de nuestro trabajo”. Rechazó toda comparación con los partidos de “la casta” y aludió al PP, “un partido en cuya sede tuvo que entrar la policía porque el presidente del Gobierno le dijo a su tesorero ‘aguanta, Luis, aguanta”.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

F. M.
Es editor de EL PAÍS América. Empezó a trabajar en EL PAÍS en 2006 tras cursar el Máster de Periodismo del diario. En Madrid se ha ocupado principalmente de información política y, como corresponsal en la Región Andina, se ha centrado en el posconflicto colombiano y en la crisis venezolana.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_