Sánchez reta a los eurodiputados a favor de Juncker que lo expliquen al partido
El líder del PSOE coincide con Cándido Méndez en el disgusto por el aval del Constitucional a la reforma laboral
No habla a humo de pajas. El futuro secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, cree saber el punto de vista mayoritario de los militantes socialistas sobre qué voto había que dar al nombramiento del luxemburgués Jean Claude Juncker, como presidente de la Comisión Europea. El futuro secretario general de los socialistas ordenó a los 14 eurodiputados socialistas españoles que votaran en contra. Tanto él, como Eduardo Madina y José Antonio Pérez Tapias, durante su carrera por el liderazgo del PSOE había propugnado ese voto contrario y encontraron, según su testimonio de muchos días de campaña, no solo el beneplácito sino la demanda de los militantes de que así lo hicieran. Con esta certeza Pedro Sánchez ha invitado a quienes discrepen que le acompañen por las sedes socialistas.
"Si hay algún compañero o compañera que no se haya sentido cómodo con esta decisión, lo único que le puedo decir es que se venga conmigo a una agrupación y se lo explique a los militantes de base". Esta ha sido su afirmación tras reunirse con el secretario general de la UGT, Cándido Méndez. No solo cree, además, que su decisión es avalada por los militantes sino también por “muchos votantes españoles”. Incomodidad ha habido en Bruselas después de que gran parte de la familia socialdemócrata europea hubiera pacto con el Partido Popular Europeo el voto a favor de Jüncker como presidente de la Comisión Europea, a cambio de la aceptación del político conservador de medidas de apoyo a las economías europeas y para empezar con una inyección de 300.000 millones de euros que se verán el próximo año.
No le convence a Sánchez el argumento de que el PSOE se sitúa fuera de un acuerdo relevante del que sí participan la mayoría de los socialistas europeos con la excepción de los laboristas británicos y los socialdemócratas suecos. Los franceses se abstuvieron. Toda la campaña europea de los socialistas españoles, también de los europeos, ha sido la división entre izquierda y derecha y la propuesta de otra política diferente a la seguida durante estos años de crisis, se recuerda en el entorno de Sánchez. Los discrepantes o incómodos se hubieran conformado con la abstención. "La política que vamos a proponer en Bruselas no pasa por las propuestas de Juncker”, ha insistido. Los eurodiputados de Izquierda Plural y de Podemos también votaron en contra.
La conversación que ha mantenido con el líder de UGT, Cándido Méndez, ha fluido con tranquilidad al compartir ambos buena parte de los pronósticos sobre la situación socioeconómica. También comparten el disgusto por el aval que ha recibido del Tribunal Supremo el núcleo central de la reforma laboral. Méndez no se conforma y acudirá a "tribunales internacionales"
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