_
_
_
_

La Audiencia absuelve al etarra juzgado por matar a tiros al exedil Isaías Carrasco

El tribunal se basa en la ausencia de pruebas para no condenar a Beñat Aginagalde

María Fernández
Familiares de Carrasco, durante en el primer aniversario del atentado en Mondragón.
Familiares de Carrasco, durante en el primer aniversario del atentado en Mondragón. JAVIER HERNÁNDEZ

La Audiencia Nacional ha absuelto a Beñat Aginagalde del asesinato del exconcejal del PSOE Isaias Carrasco, perpetrado por ETA el 7 de marzo de 2008 en Arrasate-Mondragon (Gipuzkoa), al "no quedar acreditado que fuera ejecutor de los disparos". En una sentencia, la Sección Tercera absuelve a Aginagalde de los delitos de asesinato terrorista, tenencia de armas y daños, por los que el fiscal pedía una condena de 32 años de cárcel.

Los magistrados consideran insuficientes para sustentar una sentencia condenatoria las declaraciones prestadas por dos testigos protegidos. Beñat Aguinagalde esta en estos momentos en prisión, acusado en otro procedimiento como presunto miembro del comando Asti de ETA desarticulado en 2009.

En la sentencia, la Audiencia Nacional aclara que la única prueba del caso es un "reconocimiento fotográfico acontecido un año después de los hechos", que soporta la declaración de una de las testigos que vio al sospechoso "con actitud de espera", en un portal. Esta testigo se cruzó al poco tiempo con Isaías Carrasco. Fue antes de escuchar los disparos que lo mataron y los gritos de su hija, que corría hacia el lugar del crimen. La testigo vio luego correr al chico que antes había avistado que "corría en sentido contrario".

Su testimonio se completa con el de otra testigo protegida que "vio disparar a una persona contra don Isaías", pero que no lo identificó con el acusado. La sentencia considera que "el reconocimiento fotográfico no es una prueba de cargo", sino solo un elemento dentro de la investigación. El segundo indicio, dice el fallo, "no resuelve el déficit probatorio anterior", porque el hecho de que los testigos identifiquen unos "rasgos físicos muy superficiales", no es suficiente.

Aginagalde, de 29 años, y al que la policía sitúa en el sector más intransigente de la banda, fue detenido en Cahan (Francia) en febrero de 2010. En septiembre de ese año fue procesado por el asesinato del empresario Ignacio Uría, cometido en Azpeitia (Gipuzkoa) el 3 de diciembre de 2008.

En noviembre de 2011, fue entregado por Francia a las autoridades españolas para ser investigado y juzgado por las causas que se siguen contra él en la Audiencia Nacional. Aginagalde aseguró que hasta que le interrogó el juez Javier Gómez Bermúdez, no sabía que se le imputaba el asesinato de Isaías Carrasco.

Aginagalde ha asegurado que el 7 de marzo de 2008 no pertenecía a ETA, no sabía que se iba a cometer el atentado contra Carrasco y no estaba en Mondragón y ha insistido en que no participó ni en la acción ni en su preparación. “No tengo nada que ver con esto”, dijo al tribunal.

El abogado de Aginagalde, Arriet Larralde, puso de manifiesto durante la vista que en este caso la Ertzaintza no había aportado pruebas como las que han servido en otros juicios para la condena de otros miembros del comando Asti. Larralde subrayó que no había pruebas ni de balística ni de ADN, ni declaraciones de otros miembros del comando ni análisis de los tráficos de llamadas telefónicas. “Si se hubiera dado tiempo a esta defensa para la instrucción se habría pedido el tráfico de llamadas y se habría podido demostrar que Beinat Aginagalde llamó a su amiga Arritxu para que le fuera a buscar y se hubiera podido demostrar que estaba a muchísimos kilómetros del lugar de los hechos”, dijo el letrado.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

María Fernández
Redactora del diario EL PAÍS desde 2008. Ha trabajado en la delegación de Galicia, en Nacional y actualmente en la sección de Economía, dentro del suplemento NEGOCIOS. Ha sido durante cinco años profesora de narrativas digitales del Máster que imparte el periódico en colaboración con la UAM y tiene formación de posgrado en economía.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_