España prepara un plan contra la radicalización islamista
El proyecto español incluirá acciones educativas y sociales, de forma que las comunidades más propicias a esa tendencia tengan apoyo público
La aparición de más de 2.000 europeos dispuestos a morir y matar por la yihad revela una radicalización que muchas veces escapa a los ojos de las autoridades. La Unión Europea pretende evitar esos movimientos antes de que se produzcan y los Estados preparan medidas contra los extremismos. España presentará en los próximos meses un plan contra la radicalización violenta, según ha avanzado hoy el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez. El responsable de Seguridad ha asistido a una reunión de alto nivel organizada por la Comisión Europea en Bruselas para prevenir la radicalización islámica que propicia la participación de europeos en la guerra de Siria. Ese fenómeno representa la mayor amenaza terrorista en el continente, pues muchas veces los llamados combatientes extranjeros regresan radicalizados y pueden cometer atentados como el que costó la vida a cuatro personas en el Museo Judío de Bruselas el pasado 24 de mayo (la cuarta víctima falleció más tarde). El proyecto español incluirá acciones educativas y sociales, de forma que las comunidades más propicias a esa radicalización tengan apoyo público. Se trata de propiciar “una visión moderada del Islam” y permitir que las víctimas de este tipo de acciones desmitifiquen la imagen romántica que algunos jóvenes desfavorecidos pueden tener de la yihad.
Martínez no ha querido ofrecer más detalles, pero ha expresado el compromiso español con esta estrategia europea. Tan solo un día después de que las autoridades españolas desarticulasen en Madrid una red de adoctrinamiento y captación de combatientes para la contienda siria, el secretario de Estado ha asegurado que la operación sigue abierta y que no se descartan más detenidos a raíz de todo el material incautado a los presuntos responsables de la red.
El encuentro de hoy en Bruselas ha estado presidido por la comisaria europea de Interior, Cecilia Malmström, que ha mostrado su preocupación por el auge de los extremismos, no solo del yihadismo. “Estoy muy preocupada por el crecimiento de los movimientos populistas y nacionalistas en Europa. Aunque esos movimientos no son directamente responsables de los ataques terroristas, proporcionan oxígeno y una aceptación creciente de las visiones radicales que sirve de caldo de cultivo para la violencia”, ha asegurado Malmström durante la reunión con los 28 Estados miembros y diferentes expertos en la materia.
La comisaria ha pedido implicar a los grandes gigantes de Internet –entre ellos las redes sociales- en esta lucha contra los combatientes extranjeros para “contrarrestar la propaganda terrorista”. En el encuentro de hoy han participado representantes de Google, Twitter y Facebook. Malmström pide también a los Estados que apliquen planes para apoyar a los jóvenes que quieran abandonar los grupos terroristas en los que se hayan podido implicar.
La reunión para frenar el radicalismo se produce días después de la cita que mantuvieron los ministros del Interior el 5 de junio en Luxemburgo en la que revisaron la estrategia para hacer frente a este fenómeno. Los ministros abogaron por mejorar el cruce de datos de sospechosos y los controles en fronteras –dentro del marco Schengen de libre circulación- para detectar con más eficacia a estos perfiles de combatientes extranjeros. En el ámbito de la prevención, pidieron dar voz a quienes combaten el extremismo islámico y promover iniciativas para sacar de esos ámbitos radicales a quienes se adentran en ellos.
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