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El Ayuntamiento de Burgos reabre la calle de Vitoria y la deja casi como estaba

Gamonal recupera una de sus vías principales tras impedir que se convirtiera en un bulevar Los vecinos impiden las obras, pero pierden plazas de aparcamiento

El Ayuntamiento de Burgos ha reabierto este viernes la calle de Vitoria, una de las arterias principales de la ciudad. Hace un poco más de dos meses, los vecinos del barrio de Gamonal salían a la calle para manifestarse en contra de la conversión de esta vía en un bulevar. Hoy los vecinos han recuperado su calle. Todo ha regresado a la normalidad. Casi todo. Antes en esta vía, con dos carriles por sentido, se podía aparcar en doble fila. Ahora la línea roja que está pintada sobre el pavimento se encuentra muy cerca de la acera y solo hay espacio para un coche.

"Estamos encantados, era lo que queríamos. Lo del aparcamiento no nos molesta demasiado. En Gamonal tenemos un problema eterno de aparcamiento. Nacimos con esto y así moriremos", asegura Clemente Herrero, uno de los vecinos que encabezó las manifestaciones

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La reforma de la calle de Vitoria tenía prevista la construcción de un bulevar de un carril por sentido, que sustituiría los cuatro existentes —iba a acostar ocho millones de euros—. Se iba a dejar una pista reservada a las bicicletas, y se iban a eliminar las plazas de aparcamiento, las cuales iban a ser sustituidas por un parking subterráneo de pago con 246 plazas y con un coste de cinco millones de euros. Al final los gamonaleros han conseguido que su calle permanezca sin bulevar, pero se han quedado con menos plazas de aparcamiento.

"¡Ya han abierto la calle!", afirma Eva P.R. una chica de 35 años que no se dejó asustar por los antidisturbios que por las noches intentaban disolver a los manifestantes, ella seguía presentándose a la cita diaria para comenzar a marchar en contra del bulevar. Esta gamonalera actualmente en paro, como los más de 17.000 burgaleses, ha explicado que los vecinos se entendían y podían dejar el coche en doble fila sin problema. El pacto era estacionar el vehículos en punto muerto por si fuese necesario desplazarlo algunos centímetros. En el barrio existen algunos aparcamientos, pero al ser de pago, hay muchas plazas vacías. 

Durante las protestas, los vecinos del barrio de Gamonal (60.000 habitantes), montaron un chiringuito en lo que denominaron como zona cero: la unión entre la calle de Vitoria y la calle de Santa Bárbara. Era el punto de reunión y desde donde partían para marchar en contra del bulevar. Dichas lonas continúan de pie. Clemente Herrero ha asegurado que este fin de semana serán retiradas. "Queremos que todo vuelva la normalidad", explica este vecino sexagenario. 

Las obras para convertir dicha arteria en un bulevar comenzaron a principios de enero. Solo habían conseguido levantar el pavimento —dejando una enorme zanja—, cuando la ira de los vecinos se materializó en violentos disturbios. No permitieron que se moviera ni una piedra más. La reforma de la calle se suspendió el pasado 17 de enero. Después de esta decisión el alcalde, Javier Lacalle, prometió tapar el enorme agujero. La restauración de la calle de Vitoria y la indemnización a la constructora ha costado 65.000 euros. Estas obras debían de haber finalizado en febrero, pero las fuertes lluvias y las condiciones meteorológicos lo impidieron. Este viernes ya todo es historia: dos meses después de la famosa guerra campal, la calle de la discordia vuelve a su estado original. 

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