Bono pide ante Merkel y Rajoy una campaña de la UE para ayudar a España

Allí había 12 primeros ministros, buena parte del poder europeo con Angela Merkel, José Manuel Durao Barroso, Hermann Van Rompuy o Mariano Rajoy, pero ninguno de ellos fue la estrella del congreso del Partido Popular Europeo en Dublín. La estrella fue otro, alguien que hablaba de política pero no es un político y no ha sido elegido en ninguna votación: Bono, el cantante de U2, que fue invitado a la tribuna, como irlandés, y aprovechó para hacer el discurso más largo de todos, el más aplaudido, el que más atrajo aparentemente a los delegados. Bono habló de todo, del capitalismo, de la Unión Europea, del racismo contra gitanos o africanos, de la troika, con la que fue muy duro, del rescate de Irlanda, de los bancos. Y también de Merkel e incluso de Rajoy, que estaban allí escuchándole, sentados. Merkel le aplaudía mucho, mientras Rajoy, con los cascos de traducción puestos, no parecía muy entusiasmado y solo aplaudió al final, por cortesía.

Bono habló también de España. Y mostró que está pendiente de toda la actualidad europea, también de la española. Tenía el discurso claramente muy preparado, aunque no leyó absolutamente nada. Bono defendía que hace falta mucha más Europa para salir de esta crisis, no solo una Europa económica, también de sentimientos, de unidad. Y ahí llegó su referencia a España. “Esta misma semana el primer ministro Rajoy ha urgido a la Unión Europea a hacer reformas estructurales para crear liquidez en la economía española”, arrancó Bono. “Tal vez lo logre. Pero además de eso ¿dónde está la responsabilidad familiar?”, se preguntó tras comparar a la UE con una familia en la que todos deben ayudarse. “¿Dónde está la campaña en toda Europa para animar a todos a viajar a España, a pasar allí sus vacaciones, a consumir sus productos, a escuchar música española?”. Esta pregunta retórica hizo saltar a la delegación española, que ya aplaudía entusiasmada a Bono aunque no Rajoy, que no parecía muy entusiasmado con el discurso. El cantante irlandés alternaba sus mensajes políticos con bromas y también hizo una sobre España. “Tal vez U2 debería hacer un disco de flamenco [para apoyar a España], bueno, mejor no”.