Rajoy, ante la presión de Aguirre: “Con ETA no hemos cambiado”

El Comité Ejecutivo del PP, el primero después de las vacaciones navideñas, no ha sido ni mucho menos un paseo para Mariano Rajoy. Tampoco en un asunto que tiene muy inquieta a la militancia más conservadora: la lucha antiterrorista. Esperanza Aguirre, presidenta del PP de Madrid, ha pedido la palabra para quejarse amargamente de que se hubiera permitido una reunión como la de Durango, en la que medio centenar de etarras excarcelados por el fin de la doctrina Parot reivindicaron la opción de los presos de aceptar la legalidad penitenciaria.

Aguirre ha protestado por el hecho de que el Gobierno no haya hecho nada para impedir esa reunión, ya que tanto la fiscalía como el juez dijeron que no podían prohibirla de forma preventiva, sin saber si allí se iban a cometer delitos. Aguirre ha sido muy vehemente. “Si el juez y el fiscal dicen que las leyes no permiten prohibir actos como este, cambiemos las leyes. No podemos volver a consentir una reunión de asesinos que bajo pretexto de una rueda de prensa, haga propaganda de una banda terrorista”, ha exigido como forma de presión al Gobierno. Nadie más le ha seguido su estela, y ha sido Rajoy quien le ha contestado.

“La política antiterrorista del Gobierno contra ETA es la misma de siempre. No hemos cambiado nada en esta materia. La posición del Gobierno es la misma. Pero nosotros tenemos que respetar el Estado de derecho. Hicimos cuanto pudimos”, ha explicado el presidente.

El Gobierno está muy inquieto porque dirigentes como Aguirre o la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, aprovechan el malestar generado por el fin de la doctrina Parot para ahondar en la herida interna que esto está generando en el PP y exigir al Gobierno que haga más. De hecho, este es el asunto que, con el aborto, más problemas internos le está generando a Rajoy.