Hallados muertos a tiros un matrimonio y su hijo en un pueblo de Zamora

Tres miembros de una misma familia han sido hallados muertos esta mañana en su casa de Vegalatrave, una localidad zamorana de 141 habitantes situada a 38 kilómetros de la capital de la provincia. El padre, Luis José Oliver Jiménez, jubilado de 74 años, estaba a las puertas de su casa con un tiro en la cabeza. A su lado había una escopeta. La madre, María Peña Cordero, ama de casa de 62 años, y el único hijo de la pareja, José Luis Oliver Cordero, de 37 años, han sido encontrados en el patio de la vivienda. También presentaban impactos por arma de fuego.

Fuentes de la subdelegación del Gobierno en Zamora informan de que el caso está en manos del juzgado de instrucción número dos y aseguran que no había antecedentes de violencia de género.

Dos vecinos del pueblo cuentan que los hechos han ocurrido a primera hora de esta mañana, sobre las ocho, y que el hombre se ha disparado en la cabeza. Según relatan, la mujer y el hijo habrían fallecido antes.

Aurelio Genicio, jubilado, ha conocido la noticia por la alcaldesa de la localidad, María Isabel Álvarez, quien, "llorando", le ha explicado que los tres miembros de la familia habían muerto. Él, que ayer por la tarde estuvo hablando con el matrimonio "con normalidad", no se explica qué puede haber sucedido.

María Genicio tiene 56 años y ha vivido junto al matrimonio toda la vida. Ahora la familia se había trasladado a otro domicilio, pero seguía teniendo buena relación con ellos. Genicio ha contado que María Peña, la madre, había sido dada de alta este lunes del hospital, donde había permanecido ingresada dos semanas en psiquiatría por problemas que la vecina no ha querido desvelar. "Eran muy buenas personas, pero a saber qué ha ocurrido, que lo que pasa en las casas nadie lo sabe", ha concluido.