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Veinte detenidos en las protestas contra un desahucio en Oviedo

Dieciocho de los arrestados se encontraban en el interior de la vivienda Entre los detenidos figura el propietario de la casa

Un policía inmoviliza a uno de los manifestantes. FOTO: ELOY ALONSO (REUTERS) / VÍDEO: ATLAS

Agentes de la policía han detenido esta mañana a 20 personas durante las más de tres horas que han durado las protestas para impedir un desahucio en Oviedo. Dieciocho de los arrestados se encontraban en el interior de la vivienda, mientras que los otros dos fueron apresados, en una de las cargas policiales, cuando se manifestaban en la calle.

Entre los detenidos figura el propietario de la casa, Jorge Cordero, de origen ecuatoriano, que vivía junto a su esposa y su hija de cinco meses. La familia ya había evitado un desahucio el pasado 13 de abril gracias al apoyo de miembros del 15-M y de Stop Desahucios.

Ante el aviso judicial del segundo intento de desahucio para las 9.15 de este miércoles, cientos de simpatizantes de Stop Desahucios han acudido desde primera hora de la mañana a la calle de Augusto Junquera, en el barrio de Ciudad Naranco, en cuyo número 2, en un cuarto piso, está la vivienda.

Los activistas se han situado a la entrada y final de la manzana. La policía ha vallado la calle y varias decenas de agentes antidisturbios han formado cordones para impedir el paso.

Sobre las 8.15, los ocupantes de la vivienda han arrojado petardos, huevos y líquidos a los policías que se acercaban al portal del edificio, que estaba atrancado con largos pilares metálicos desde dentro y que ha llevado a los agentes a destrozar las puertas con mazas hasta retirar las fortificaciones.

Mientras, los manifestantes a ambos lados de la calle han elevado los cánticos de protesta, especialmente con la llegada sobre las 8.50 de la comisión judicial, momento en el cual se ha producido la primera carga policial. Varios agentes han salido del cordón y han aporreado y perseguido a manifestantes. Uno de los agentes ha seguido a la carrera por varias calles a un manifestante hasta que ha caído, ha recogido balas del suelo con la pistola desenfundada y ha cesado en la persecución. Esta refriega se ha saldado con varios contusionados, entre ellos una chica con la cara ensangrentada.

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Sobre las 9.45, después de que la policía se haya provisto de hachas de bomberos y mientras se escuchaba desde la calle los golpes contra la puerta del domicilio del cuarto piso, los ocupantes de la vivienda asomados a los balcones han tirado mochilas a sus compañeros de la calle.

Los policías han vuelto a romper el cordón para apoderarse de algunas de estas mochilas y se ha producido una carga policial mayor, en la que después de varios minutos de enfrentamientos dos de los manifestantes, un hombre y una mujer, han sido inmovilizados en el suelo, esposados y llevados a un furgón.

Alrededor de las 10.30, la policía ha conseguido acceder a la vivienda y ha comenzado a bajar esposados a los 18 ocupantes. Las protestas han seguido hasta las 11.30, animadas desde los balcones de la calle por una cacerolada vecinal.

"Se va a acabar la paz social", "la lucha seguirá", "vergüenza me daría ser de la policía" o "banqueros al furgón" han sido algunos de los cánticos.

El jefe del operativo policial ha explicado a los periodistas que las detenciones en la calle se produjeron porque los manifestantes "se abalanzaron" sobre los policías que trataban de recuperar las mochilas, que podían tener "elementos peligrosos" al ser arrojadas desde la vivienda objeto del desahucio y eran "de interés policial".

Los manifestantes se han citado para continuar la protesta ante la sede central de Cajastur, entidad con la que tiene la hipoteca Jorge, un extransportista ecuatoriano que desde 2008 no ha podido hacer frente a los pagos.

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