Detenidos en Melilla dos salafistas acusados de asesinar a un exsectario
Fuentes policiales afirman que a los dos arrestados se les relaciona con el movimiento Takfir wal Hijra (anatema y exilio)
La Comisaría General de Información de la policía detuvo ayer en Melilla a dos supuestos yihadistas presuntamente implicados en el asesinato de una persona en Marruecos a la que acusaban de ser colaboradora de los servicios de seguridad de ese país. Los detenidos, ambos melillenses, son Rachid Mohamed Aldelá y Nahid Mohamed Chaid.
Fuentes policiales afirman que a los dos arrestados se les relaciona con el movimiento Takfir wal Hijra (anatema y exilio). Se les ha incautado numerosa documentación relacionada con grupos de tipo salafista, pero ambos iban desarmados.
Los detenidos están acusados de la muerte en 2008 de Salam Mohand Mohamed, exmiembro de la secta a la que pertenecía Mohamed Atta, el jefe de los suicidas del 11-S, y varios de los autores de la matanza de Atocha en Madrid. Según la investigación, los dos supuestos homicidas le mataron en 2008, le secuestraron y torturaron en Farhana, cuando él y su novia, Fátima, pretendían marcharse a Barcelona para escapar de las garras de la secta, a la que habían pertenecido hasta entonces. El cadáver de Salam, de 21 años, fue descubierto semidesnudo y atado de pies y manos en un bosque Buyafar (Cabo chico), en territorio marroquí. Junto a él se hallaba el cuerpo de Rachid Chaid, un joven melillense de su mismo barrio que le acompañaba.
El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha explicado esta mañana que los dos detenidos pertenecen "a la misma ortodoxia radical" de los islamistas que se inmolaron en Leganés (Madrid), días después de los atentados del 11 de marzo de 2004, en los que murieron 191 personas en el ataque terrorista con bomba a varios trenes en la capital de España.
El grupo que supuestamente lideraban los detenidos se dedicaba a reclutar a jóvenes y tenía conexiones internacionales para su formación en campos de entrenamiento o zonas de conflicto bélico. Ambos estaban a la cabeza de un grupo compuesto en su mayoría por ciudadanos españoles de origen magrebí asentados en Melilla y marroquíes residentes en Farhana (Marruecos). La célula se caracterizaba por su marcado hermetismo y por la adopción de fuertes medidas de seguridad internas para mantenerse en la clandestinidad.
Uno de los referentes religiosos del grupo es Abu Qutada, que en sus labores de adoctrinamiento yihadista ponía como ejemplo a los terroristas que se suicidaron en un piso de Leganés el 3 de abril de 2004.
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