Cierra el sórdido centro de internamiento de extranjeros de Málaga tras 22 años
El CIE ha sido escenario de numerosos incidentes e irregularidades policiales Los 14 internos que quedaban han sido trasladados a Algeciras y Madrid
El Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Málaga, el más controvertido de los 10 que hasta ahora funcionaban en España, ha cerrado este miércoles definitivamente sus puertas. Los últimos 14 internos ingresados en el antiguo cuartel de Capuchinos han salido esta mañana del centro con destino a los CIE de Algeciras (Cádiz) y Aluche (Madrid).
La semana pasada, el Gobierno, a través de su delegado en Málaga, Jorge Hernández Mollar, anunció el cierre definitivo del centro porque las instalaciones “no permitían que ni los internos ni los funcionarios tuvieran unas condiciones dignas de habitabilidad”. La clausura del centro de extranjeros había sido reclamada por las ONG de derechos humanos casi desde el año de su apertura, 1990. A las peticiones de las organizaciones humanitarias se fueron sumando con el paso de los años los Defensores del Pueblo central y autonómico, la fiscalía, los jueces e incluso los mandos policiales.
El CIE, un edificio ruinoso desde su puesta en funcionamiento, ha sido escenario de diferentes polémicas e irregularidades policiales. Las más sonadas fueron la deportación, previa sedación con haloperidol, de 103 inmigrantes africanos en el año 2000 y el caso de corrupción policial en el que cinco agentes del Cuerpo Nacional de Policía fueron acusados de delitos sexuales contra internas del centro. Todavía están pendientes de juicio. Pero el centro también ha padecido incendios, suicidios y, sobre todo, ha sido tildado de tener instalaciones "peores que una cárcel".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.