“Razones para la huelga hay. El Gobierno debe sentarse a hablar”

Valeriano Gómez, miembro de UGT y hoy diputado, fue el último ministro de Trabajo de PSOE. Le tocó aplicar la reforma laboral de 2010, con la que había sido muy crítico. Asegura que esta es incomparablemente más dura.

Pregunta. ¿Respalda el PSOE esta huelga general?

Respuesta. En democracia, a los partidos no les corresponde respaldar una huelga. La convocan los sindicatos. Nosotros lo que sostenemos es que hay tiempo todavía para que el Gobierno se siente con los sindicatos y acabe con esta ausencia total de diálogo que ha motivado la huelga.

P. ¿Hay motivos de fondo, además de ese, para ir a la huelga?

R. Desde el 30 de noviembre no ha habido una sola reunión del Gobierno con los sindicatos para negociar una reforma de este calado. Se les ha comunicado una reforma ya hecha. Y también hay razones de contenido. Nunca antes se había producido una reforma como esta, que rompe el centro de gravedad de las relaciones laborales en España. Razones para la huelga hay.

P. Usted acudió a la manifestación de la huelga general de 2010, contra el Gobierno del PSOE del que justo después fue ministro. Y ha asistido a las manifestaciones de estos días contra la reforma. ¿Acudirá a la del día 29?

R. He explicado muchas veces que yo fui a la manifestación de 2010 para expresar mi apoyo al papel de los sindicatos, que consideraba seriamente atacado, sobre todo en Madrid. No hice huelga aquella vez y tampoco voy a hacerla ahora, porque no creo que los diputados debamos hacer huelga. A la manifestación del día 29 aún no he decidido si iré, aunque no estaré lejos de los que vayan.

P. ¿Acudirá algún representante del PSOE?

R. Sí, imagino que sí.

P. Por su experiencia, ¿hay margen para que el Gobierno rectifique? En 2010 no rectificó.

R. Tras la huelga de 2010 se normalizó mucho la relación con los sindicatos, sobre todo con el acuerdo de la reforma de las pensiones que incluyó algunos aspectos de política laboral. Sí, creo que hay margen. Y aquella reforma laboral había llegado tras un año de negociaciones. Aquí no ha habido ninguna negociación. El Gobierno debe sentarse a hablar.

P. ¿Le provoca alguna incomodidad al PSOE esta situación, teniendo en cuenta que ustedes también afrontaron una huelga general por abaratar el despido?

R. No hay ningún parecido. Nosotros extendimos el contrato con despido de 33 días y clarificamos algunas causas, como la previsión de pérdidas, para el despido con 20 días. Pero ahora lo que se dice es que ni siquiera es necesario entrar en pérdidas, basta con una caída de ingresos. ¿Qué empresa no está disminuyendo ingresos en este momento? Además, en esta reforma hay muchas más cuestiones: la flexibilidad unilateral, la anulación de los convenios después de dos años... Esta reforma no continúa las anteriores, es una ruptura total que no se había atrevido a hacer ningún Gobierno, ni de izquierdas ni de derechas.