Primer cara a cara PP y PSOE... pero de sus líderes juveniles

Los líderes de las organizaciones juveniles del PP –Beatriz Jurado, cordobesa, licenciada en Derecho y de 28 años- y del PSOE –Sergio Gutiérrez, de Escalona (Toledo), también abogado y de 29- debatieron la pasada tarde-noche por primera vez en público y lo han hecho en plena precampaña, con la calidad de la democracia, el paro juvenil, la Educación y el Estado del Bienestar sobre la mesa. El escenario ha sido el Gran Teatro de Manzanares (Ciudad Real), cuyas 700 butacas se han llenado la mitad y, de ellas, la mitad también estaban ocupadas por jóvenes.

El encuentro, organizado por la Escuela de Ciudadanos –creada por el periodista de EL PAÍS Román Orozco-, ha estado moderado por Eduardo San Martín. Ambos veteranos periodistas se han sentado en una mesa central en el escenario, delante de un gran telón de terciopelo rojo, mientras los contendientes estaban dispuestos al contrario de sus posiciones políticas: Jurado a la izquierda del público y Gutiérrez a la derecha, ambos sentados en un taburete ante un atril.

En las dos horas de debate ha cabido casi todo, empezando por la admisión de la culpa colectiva en la crisis -“esto era el chocolate del loro pero el loro fue engordando y engordando hasta que…”, ha dicho gráficamente Jurado, “ha fracasado un modelo de sociedad que habíamos construido entre todos, también entre los dos principales partidos", ha reconocido Gutiérrez- y pasando por los trapos sucios - "aquí no hay buenos ni malos, están los que gestionan bien y los que mandan a cinco millones de personas al paro", ha echado en cara Jurado a Gutiérrez cuando este ha sacado a colación los recortes educativos en Madrid o la situación de las farmacias en Castilla la Mancha-.

También ha habido lugar para las confesiones. Jurado ha contado que, como Aznar, habla “un poco catalán” cuando defendía que en las escuelas se enseñen las lenguas cooficiales ante la crítica de un asistente en la breve ronda de preguntas. Gutiérrez ha reconocido por su parte que le habría gustado ser “un líder del 15-M”. El cara a cara entre los cachorros de ambos partidos ha reproducido el tono general de la precampaña: un PP vehemente y crecido frente a un PSOE que asume culpas y trata de defenderse. Y, sobre todo, ha evidenciado el gran asunto en juego en estas elecciones: el modelo de sociedad. La presidenta de Nuevas Generaciones (NN GG), que lleva apenas seis meses en el cargo, se ha mostrado contraria al "papá Estado" y a que "lo público sea el motor de la economía", mientras que el secretario general de las Juventudes Socialistas de España (JSE), elegido en 2007, ha defendido a capa y espada los avances sociales y ha rechazado medidas como abaratar el despido o retroceder ni un paso en “una educación universal, pública y gratuita”.

En el primer tema introducido por el moderador, el paro y el dato conocido hoy, Jurado ha culpado de la situación al Gobierno y a su reforma laboral "parche". "Para solucionar esto tenemos que dejar de echarnos las culpas unos a otros", le ha replicado Jurado que, pedagógico, ha recordado que la situación actual es hija del boom de la vivienda, el posterior pinchazo y unos jóvenes, "anclados al andamio" y sin formación en otros sectores. En el segundo gran bloque, Educación, San Martín les ha preguntado si no sería necesario un pacto de Estado para que un modelo educativo dure más de dos legislaturas y si el Estado debe recuperar las competencias. "La educación es fundamental, es la base de la igualdad de oportunidades", ha subrayado Gutiérrez, para poner el dedo en la llaga de los recortes educativos del PP. Jurado le ha acusado de “falsa demagogia”, se ha quejado de la “campaña sucia” del PSOE en este tema y ha abogado por un pacto de Estado por la Educación que dure "al menos 15 años".

"Ningún gobierno que ha gobernado este país, ninguno, ha dado con la tecla de la educación, si no, no habría estas cifras de fracaso escolar", ha admitido la líder de NNGG. En este punto, eñ moderador ha introducido el tema del 15-M y la calidad de la democracia en España. "El 15-M es un revulsivo para todos los demócratas, demuestra que la sociedad está viva", ha admitido Jurado, que ha opinado que es un movimiento "de una izquierda huérfana, que no ha encontrado un líder o lideresa" y ha tenido que salir "a la calle a reivindicarlo". Gutiérrez ha manifestado su envidia sana hacia un movimiento que ha “conseguido poner encima de la mesa lo que otras organizaciones juveniles no han logrado”. Y ambos han pedido una reforma constitucional y de la ley electoral. Como cierre, se han mostrado optimistas y han negado que esta generación vaya a vivir peor que sus padres. Su propia experiencia personal lo demuestra: sus padres no pudieron estudiar, ellos sí.